Sobresaltado del lance, fuera de su casa, al ver perdida la pieza real también, teme perderse él. Aquí segundo repite
Jaque Cloto, que mate es; porque sin reina, defensa no puede el juego tener.
Ricardo Palma
¡Hola! ¡Jaque! --que profería un caballero, bien armado de acero púrpura, que venía galopando hacia ella blandiendo una gran maza.
-¡Rey negro! -contesté, y no me abrieron-. ¡Jaque! -grité tres veces en un minuto, y nada, no me abrieron. Llamé al sereno, que venía abriendo puertas de acera en acera, saliéndose de sus casillas a cada paso.
En un salón, la mujer que parecía tener menos simpatía por el lugar, era la que escogía como objetivo de sus acometidas; hacerla pasar de la aversión al amor mediante hábiles transiciones, era para él un placer delicioso; imponerse a las almas que le rechazaban, dar jaque mate a las voluntades rebeldes gracias a su influencia, le parecía el más dulce de los triunfos.
Las fuerzas mecánicas e industriales, puestas en jaque por el sistema de la ganancia, sólo requerían que se las dejase libres para transformar la situación económica de la humanidad como por arte de magia.
Me alejé de la mesa del desayuno y, cuando yo subía por las escaleras, me tropecé con mi tío, que bajaba por ellas, trayendo en una mano una vieja llave roñosa, y en la otra, una caja pequeña de bronce, por el estilo de las de guardar el dinero. «Que hagan lo que les dé la gana, pero yo los tendré en
jaque una vez más.
Arthur Conan Doyle
El calavera silvestre es hombre de la plebe, sin educación ninguna y sin modales; es el capataz del barrio, tiene honores de
jaque, habla andaluz; su conversación va salpicada de chistes; enciende un cigarro en otro, escupe por el colmillo; convida siempre y nadie paga donde está él; es chulo nato; dos cosas son indispensables a su existencia: la querida, que es manola, condición sine qua non, y la navaja, que es grande; por un quítame allá esas pajas le da honrosa sepultura en un cuerpo humano.
Mariano José de Larra
Currito el Guapo, su más aventajado oficial, hábil como nadie en remendar y zurcir cueros, y sobre todo en poner botanas, se había despedido de casa de la maestra, y se había lanzado en la vida heroica del jaque, buscando aventuras y aterrando a toda la gente pacífica de la población.
El instinto combativo del fox-terrier se manifestó normalmente contra las hojas secas; subió luego a las mariposas y su sombra, y se fijó por fin en las lagartijas. Aún en noviembre, cuando tenía ya en
jaque a todas las ratas de la casa, su gran encanto eran los saurios.
Horacio Quiroga
Las casillas de un tablero de ajedrez se pintan alternativamente de negro y de blanco, para comodidad de los adversarios. Pura fórmula. Hay un rey blanco y un rey negro; mas lo esencial es dar jaque mate al otro. ¡El otro es el enemigo!
Es sabido que los obreros, con una valentía y una genialidad sin ejemplo, sin jefes, sin un plan común, sin medios, carentes de armas en su mayor parte, tuvieron en jaque durante cinco días al ejército, a la Guardia Móvil, a la Guardia Nacional de París y a la que acudió en tropel de las provincias.
Rangel sostenía una lucha desigual; solo en un extremo tenía en
jaque a un grupo de soldados, mandados por un sargento, que recortaba su figura de león enfurecido con el acero silbante de sus fusiles.
Práxedis G. Guerrero