Sakura suele juguetear con los grandes pechos de su compañera Yukari Ootani, acosándola inocentemente.;Akira Tobari Es el novio de Momoko.
-Ya he presentado mi informe en la comisaría -dijo. Holmes enterró la mano en el bolsillo, sacó medio soberano, y se puso a juguetear con él despaciosamente.
Y él, al sentir así sacudida su mano, la separó de donde la posaba, pero fue para echar el brazo sobre el cuello y hacer juguetear entre sus dedos uno de los pendientes de su novia.
Algunos grupos discurren por entre estas maravillas naturales, otros se entretienen en juguetear con grandes pájaros inteligentes y listos, o se recogen en las aguas, convidados de aquella elevada temperatura.
Esencias de heno cortado y de brisa de violetas de Parma impregnaban su piel satinada y flexible, y cuando, satisfecha del aseo -porque los animales se habitúan a él y llegan a exigirlo como las personas-, empezaba a
juguetear y correr en torno de la doncella encargada de la toilette, otra doncella acudía con la bandeja de plata, en que la taza del té con leche humeaba en medio de una torrecilla de bizcochos dorados, crocantes y frágiles.
Emilia Pardo Bazán
En Pallata, cuando hacía mucho tiempo de la salida de Pacarejtampu, y cuando los niños que habían salido en el regazo de las madres eran ya capaces de caminar delante de los soldados y de juguetear con los pumas de Ayar Cachi, encontráronse con una tribu fuerte y aguerrida, bárbara y sanguinaria.
¿No veis al través de ellos brillar de amor la estrella vespertina, y
juguetear sus pálidos destellos en la cumbre de la árida colina ?
Olegario Víctor Andrade
XÓLOTL era muy gracioso y tenía la habilidad de empequeñecerse tanto que se miraba como arrugado, mas esto le servía para juguetear o para esconderse y vigilaba lo que acontecía sin que nadie lo sospechara.
«Que toda doncella perteneciente a la fe verdadera contraiga matrimonio con uno de los elegidos: pues si se uniera a un gentil, cometería pecado nefando.» Siendo ello así, no es posible que tú, que profesas el credo santo, hayas consentido que tu hija lo vulnere. Nada repuso John Ferrier, ocupado en juguetear nerviosamente con su fusta.
Cuando llego a la escuela me gusta fantasear la bandera me saluda y su escudo me hace chao. Cuando llego a la escuela me gusta fantasear: Hoy no tengo tarea; me voy a juguetear.
¡Si a lo menos antes de tu fuga me quedase alguna prenda de tu amor; si viese juguetear en mi corte un pequeñuelo Eneas, cuyo rostro infantil me recordase el tuyo, no me creería enteramente vendida y abandonada!" Dijo.
Hasta que de tanto usarlo una madrugada se rompió. Extrañamente Mig dejó de murmurarle sus aprendizajes; Ger, de
juguetear; Jor de acompa-ñarlo; Alf, de guiarlo.
Antonio Domínguez Hidalgo