Tal fue la destrucción de las ciudades, al instante destruidas sobre la tierra. Como hiere el relámpago y destruye a la piedra, aterrorizaba de súbito, sometía a las tribus.
Joven o viejo, decía el poeta, son “papeles que reparte la vida y que no siempre coinciden con nuestra vocación”. ¡No!, no asistimos a un ilógico súbito cambio de generaciones.
-En buen hora -dijo Ricardo-; y vuélvote a advertir que los cinco versos dijo el uno y los otros cinco el otro, todos de improviso; y son éstos: Como cuando el sol asoma por una montaña baja y de
súbito nos toma, y con su vista nos doma nuestra vista y la relaja; como la piedra balaja, que no consiente carcoma, tal es el tu rostro, Aja, dura lanza de Mahoma, que las mis entrañas raja.
Miguel de Cervantes Saavedra
Al brillante y
súbito resplandor de los relámpagos sucede una claridad tenue y azulada, una luz indecisa, semejante al primer albor de un día sin sol y sin aurora.
Gustavo Adolfo Bécquer
Parece que existe bastante lógica en estas afirmaciones, porque, prácticamente, hubiera sido imposible explicar el súbito nacimiento brillante de las respectivas civilizaciones de estos pueblos, si no hubiera habido el aporte civilizado venido de otros mundos; tanto más que, todas las civilizaciones de la Tierra están marcadas con el signo de Venus, con "dioses", es decir, con seres superiores, que eran considerados venusianos; tales como Quetzalcóatl, Orejona, Viracocha, Yshtar, Astarté y Anita.
Cierto de las misericordias del Señor, lo que me aflije son estos perjuicios que he originado, y suplico encarecidamente que no sigan: vosotros ya lo sabeis, os habeis de ver ó en un momento súbito que de impoviso os traslade al tribunal de Dios, ó en los que S.M.
Fue en ese momento cuando Old, que iba adelante, vio tras el alambrado de la chacra a míster Jones, vestido de blanco, que caminaba hacia ellos. El cachorro, con súbito recuerdo, volvió la cabeza a su patrón, y confrontó.
Apenas pudo el sol su cabellera sacar del seno de su antigua madre y comenzó en la parte más cimera a dar calor como amoroso padre, cuando Martán, temiendo que pudiera Grifón hacer que cuanto urdió descuadre y descubrir su fraudulenta arte, pidió licencia, y súbito se parte; hallando como excusa al ruego regio no presenciar la máscara irrisoria.
¡Constructores agrícolas, civiles y guerreros, de la activa, hormigueante eternidad: estaba escrito que vosotros haríais la luz, entornando con la muerte vuestros ojos; que, a la caída cruel de vuestras bocas, vendrá en siete bandejas la abundancia, todo en el mundo será de oro súbito y el oro, fabulosos mendigos de vuestra propia secreción de sangre, y el oro mismo será entonces de oro!
¡Esta noche, mi establo de Belén será el corazón de fiera de tu padre! Al oír la promesa del Niño, Lucía experimentó tan
súbito gozo, que no lo pudo resistir.
Emilia Pardo Bazán
Volcán, cuando habló aquel Xibalbá. De súbito éste se borró de delante de sus rostros, sin irse. Entonces llegaron las tribus que perecían de frío: mucho granizo, obscuridad, lluvia, helada; incalculable el frío.
No se trata del arribo de los incipientes con “c” e insipientes con “s”, no se trata del retiro de los maduros ni, mucho menos, de un cambio súbito de generaciones.