Los tonos del crepúsculo pintaban los celajes de incopiables irisaciones, de opalinas transparencias; tras las enhiestas cumbres habíase hundido el sol dejando a su paso los últimos vaporosos pliegues de oro de su esplendorosa clámide; el valle adormecíase al conjuro de las primeras vaguedades precursoras de la noche; empezaban a esfumarse los contornos de los caseríos y de la arboleda; de vez en cuando turbaba el silencio la voz de alguno de los campesinos, que hablaba a distancia, o el rumoroso tintineo de las esquilas del ganado conducido a los apriscos por los pastores; algo dulce y sedante iba adueñándose del panorama, y allá en lo más hondo de etéreos abismos iban apareciendo los luceros y las estrellas, que parecían parpadear rutilantes y misteriosos.
Texto Bruto, viendo que dependían dél todos los valientes y leales de la ciudad, revolvía el peligro en lo más hondo de su ánimo, y procuraba en el semblante componer los sentidos de día; y de noche en su casa no era el mismo, porque a veces, a pesar del sueño, le solicitaba congojosamente el cuidado.
«No, primero voy a mirar», se dijo, «para ver si lleva o no la indicación de veneno.» Porque Alicia había leído preciosos cuentos de niños que se habían quemado, o habían sido devorados por bestias feroces, u otras cosas desagradables, sólo por no haber querido recordar las sencillas normas que las personas que buscaban su bien les habían inculcado: como que un hierro al rojo te quema si no lo sueltas en seguida, o que si te cortas muy hondo en un dedo con un cuchillo suele salir sangre.
Pero a cada estallido, que no era sino un
hondo suspiro, pensaba el árbol en un atardecer de verano en el bosque o en una noche de invierno, bajo el centellear de las estrellas; y pensaba en la Nochebuena y en KlumpeDumpe, el único cuento que oyera en su vida y que había aprendido a contar.
Hans Christian Andersen
Sabía muy bien qué eran aquel desgano y aquel hormigueo a flor de piel. Sentóse filosóficamente a tomar mate, y media hora después un
hondo y largo escalofrío recorrióle la espalda bajo la camisa.
Horacio Quiroga
5°.-Frente á la boca del río Santa Rosa, la frontera cortará el río Purús hasta el medio del canal más hondo, y de ahí continuará, en la dirección del Sur, subiendo por el thalweg del Purús hasta llegar á la confluencia del Shambuyaco, su afluente de la margen derecha entre Catai y el Santa Rosa.
Y el enfermo se fue a la lluvia a aprontar el café a sus hijos. Sin darse cuenta precisa de lo que había hecho esa tarde, Subercasaux vio llegar la noche con
hondo deleite.
Horacio Quiroga
«Sí, estará malo, fijamente estará malo», pensaba algunas horas después llena de profunda inquietud Dolores, al par que registraba con sus hermosísimos ojos las verdes frondas del huerto; y cuando ya las melancólicas claridades del crepúsculo empezaban a matizar de misteriosas tonalidades el espacio, las verdes ramas y las azules lejanías, una voz dulce y triste, la voz de Joseíto, resonó allá en lo más hondo del huerto...
Él sabía que querían matarlo; mientras que cavaba el hoyo, cavaba al lado un segundo hoyo para salvarse. “¿Está ya muy hondo?”, le fue dicho desde arriba por los cuatrocientos jóvenes.
Cenaron enseguida y se acostaron rendidos, bajo el estruendo del cinc que el diluvio martilló toda la noche con implacable violencia. Al rayar el día, un
hondo escalofrío despertó al dueño de casa.
Horacio Quiroga
-Queriéndote como ella te quiere ya puées tú jacer lo que te dé la repotentísima gana, que pa la gachí que quiee a su hombre, pa esa no hay más colores que el rosa si es de su hombre de quien se trata; y conste que no te hablo yo de memoria, que esto que te aconsejo yo, yo lo jice en su día, que parneses y no pocos parneses tenía tamién mi probetica María de los Dolores. Y al decir esto un hondo suspiro brotó en labios del Castizo por cuyos ojos resbaló una ráfaga de melancólica tristeza.
- Los barrios urbanos Candelaria, Cárcel, Marina Meridional, Marina Septentrional, Río y Salud; los barrios Miradero, Mayagüez Arriba, Quebrada Grande, Sábalos, Juan Alonso, Algarrobo, Guanajibo y Río Hondo del municipio de Mayagüez.