- he ratificado mi decisión: los minúsculos los grupos o intereses, que todavía no desentrañamos en donde se arraiguen, no pueden frustrar la posibilidad de que el país, olvidando en todos los ámbitos, tenga el derecho a estrenar tiempos vírgenes.
Supo al día siguiente al abrir por casualidad el ropero, lo que es ver de golpe la ropa blanca de su mujer ya enterrada; y colgado, el vestido que ella no tuvo tiempo de
estrenar.
Horacio Quiroga
mademoiselle Marie: José Martí Hay sol bueno y mar de espuma, Y arena fina, y Pilar Quiere salir a
estrenar Su sombrerito de pluma.
José Martí
Y deslizando la mano bajo un montón de medias de seda, sin
estrenar, largas y elásticas como víboras, que parecían retorcerse, sacó la niña un objeto que se quedó mirando, fascinada.
Emilia Pardo Bazán
Tampoco Alberto quería quedarse atrás en aquella fiesta que él mismo había promovido: iba a
estrenar oficialmente el landó con su tronco de caballos ingleses, y en ellos se ocupaba.
Tomás Carrasquilla
Inaccesible al deshonor, floreces; creeré en ti mientras una mexicana en su tápalo lleve los dobleces de la tienda, a las seis de la mañana, y al
estrenar su lujo, quede lleno el país, del aroma del estreno.
Ramón López Velarde
Mientras tanto, las tinieblas cubrían la tierra entera y, habiendo sobrevenido un gran teremoto, se derrumbó el santuario y el pináculo del templo. IV 1.Entonces yo, José, demandé el cuerpo de Jesús y lo puse en un sepulcro nuevo, sin
estrenar.
Anónimo
Se hizo un breve silencio que rompió el desconocido. Es una obra totalmente nueva; sin estrenar aún. Entonces continuó Gisquette ¿no es la misma que dieron hace dos años, cuando la llegada del señor legado, en la que intervenían tres muchachas que hacían de...
Traigo de mi pueblo el tributo de admiración a la lucha que han librado y ganado ustedes los nicaragüenses; a celebrar con ustedes la victoria, a estrenar los tiempos de su responsabilidad.
Siente angustia, susto, piensa unas cosas vagas que le causan miedo y que le dan tristeza. Ya no piensa en ir, después de la comida, a
estrenar el arma.
Tomás Carrasquilla
Pensé que trajeses en la mollera sal fresquita y estilo nuevos. Para eso, no vale la pena de
estrenar siglo. El XX.- Hablo así porque estoy en España, donde el vino añejo y la misma sangre hirviente de la mocedad se echa en odres vetustos, de formas arcaicas que hemos respetado y canonizado los señores siglos.
Emilia Pardo Bazán
Los guantes amarillos, que hemos visto
estrenar en el teatro del Vaudeville de París al inimitable Arnal, para quien se escribieron, es uno de los más ingeniosos juguetes que pueden presentarse en la escena y ha gustado en cuantos teatros de Italia y de Inglaterra se ha traducido.
Mariano José de Larra