Los heridos eran evacuados a la valetudinarium o enfermería en carros al que eran llevados sobre ferulum rusticum o angarillas por camilleros.
Otras veces, siguiendo una tradición medieval, eran los propios alfareros los que vendían su producción, transportando sus hornadas de cacharros en las angarillas de sus burros.
Los monjes, cargados con angarillas y albardas, sufrieron mofa, los hombres degollados en la carnicería y unas 300 mujeres, primero fueron violadas y luego acallados sus clamores quemándolas vivas en la iglesia del pueblo.
Los monjes, cargados con angarillas y albardas, sufrieron mofa, los hombres degollados en la carnicería y unas 300 mujeres, primero violadas y, luego, sus clamores fueron acallados quemándolas vivas en la iglesia del pueblo.