Y rodeada de aromáticos huertos, sobre islotes erigidos a fuerza de sudor, despedía una frescura y un verdor que parecía rodearse de esmeraldas o de jade.
Cada día y cada noche la tierra fue absorbiendo el agua. Así TOLLAN recobró un poco de su antiguo verdor, pero ni HUEMAC ni el TOUEYO estaban allí.
Cíñela el verdor de una eterna primavera; y los árboles de sus jardines maduran y abren a un tiempo mismo sus flores y sus frutos.
Pero él permanecía insensible a aquellas bendiciones de la Naturaleza. Seguía creciendo, sin perder su
verdor en invierno ni en verano, aquel su
verdor oscuro.
Hans Christian Andersen
Con decidido arranque, trepé como pude por una de aquellas palmeras con el fin de ver más allá del oasis y ya estando arriba, descubrí en la distancia, unas altísimas montañas que, según su forma, parecían estar forradas de bosques deslumbrantes en su verdor.
En aquel momento le parecía todo infinitamente hermoso, pues volvía a estar en medio del
verdor, tomaba parte en la fiesta y el regocijo, oía el canto y la música, el rumor y el zumbido de muchas voces humanas, especialmente las que llegaban de la parte del jardín adornada con linternas de papel de colores.
Hans Christian Andersen
Ven, pues, mi prenda amada, Que ya fallece mi cansada vida De esta ausencia pesada; Ven, pues, que mientras tarda tu venida, Aunque me cueste su
verdor enojos, Regaré mi esperanza con mis ojos.
Sor Juana Inés de la Cruz
Grandes macizos de verdor flanqueaban el río, en cuyas orillas blanqueaban los molinos ribereños, de zafir purísimo parecía el horizonte y de cristal el espacio.
Todo su ropaje era verde, como las hojas del saúco, lleno de grandes flores blancas. A primera vista no se distinguía si aquello era tela o
verdor y flores vivas.
Hans Christian Andersen
Un júbilo extraño innovaba rocas, montes, montañas, volcanes; un
verdor misterioso acrecentaba la hierba, los matorrales y los árboles; un colorido de ropa nueva se extendía sobre la tierra, sobre el agua, en el viento...el propio sol se transformaba.
Antonio Domínguez Hidalgo
Al concluir, quiero citar a uno de nuestros mejores poetas, Wally Mongale Serote, que ha escrito estas bellas palabras en su obra Ofay-Watcher Looks Back: "Quiero ver lo sucedido; Luego, Silencioso como las raíces al romper la tierra Miro lo sucedido Distingo si sobre las casas hay humo o polvo Quiero ver lo sucedido Luego, Silencioso como las plantas que muestran su verdor Quiero ver lo sucedido, Cuando las casas me hacen preguntar: ¿vive alguien aquí?
están ahí, 1 poema el amor triste apagado y enfermo se sufre con dolor y angustiada pasión, 1 poema viejo pascuero: gran negocio mundial muy bien inventado, 1 poema quebradas sureñas en verano soñadas, te sientes parte de su verdor y gozas con su encanto...