De todo habla incansable, y corta y raja, lanzando un epigrama a cada uno, pues no siendo sus versos, todo es paja. ¿Quién es aquél que ayer aun hecho un
tuno, roto paseaba y andrajoso el Prado, y hoy no saluda en zancos a ninguno?
Mariano José de Larra
Juntos habían mataperreado en la infancia y el presidente abrigaba por él fraternal cariño. Cuculí era un
tuno completo. No sabía leer, pero sabía hacer hablar a las cuerdas de una guitarra, bailar zamacueca, empinar el codo, acarretar los dados y darse de puñaladas con cualquierita que le disputase los favores de una pelandusca.
Ricardo Palma
-dijo Rueda. -Eso es -añadió Merengueda-, no queremos ser responsables de las picardías de ese tuno. Rueda hablaba de pedir una satisfacción a Blindado al día siguiente.
¿Esto es otro embeleco francés? Este Bergson es un
tuno; ¿verdad, maestro Unamuno? Bergson no da, como aquel Immanuel, el volatín inmortal; este endiablado judío ha hallado el libre albedrío dentro de su mechinal.
Antonio Machado
El escribano debió ser, por mi cuenta, pescador de mar ancha y un
tuno de primera fuerza; porque redactó las declaraciones con una crudeza de palabras que...
Ricardo Palma
América es el teatro de los sucesos; cos- tumbres y tipos americanos son los exhibidos y el que escriba Tradiciones, no sólo está obligado á darles colorido local, sino que, hasta en el lenguaje, debe sacrificar, siempre que opor- tuno lo considere, la pureza clásica del castellano idioma, para poner en boca de sus personajes frases de riguroso provincia- lismo, y que ya perderá tiempo y trabajo el que se eche á buscarlas en los diccionarios.
Cuentan que un fraile con ribetes de
tuno y de filósofo, administrando el sacramento del matrimonio, le dijo al varón: «Ahí te entrego esa mujer; trátala como a mula de alquiler, mucho garrote y poco de comer».
Ricardo Palma
Si alguien al alcanza, si la requiebra, ella, ligera como una cebra, sigue camino del almacén; pero ¡ay del
tuno si alarga el brazo!
Manuel Gutiérrez Nájera
Enseguida venía el más tarde celebérrimo caudillo del segundo patio, Benjamín Hernández, oficial de carpintería, soltero, menor de edad, turbulento, enamorado, botarate, tuno y hablador.
Verdad que hay en él un aire de
tuno que no es para envidiado, y que no me entró nunca por el ojo derecho a pesar de sus zalamerías y dingolodangos.
Ricardo Palma
Los ca- bildantes, que á la misa cojicurrieron se sulfuraron ante tama- ña irreverencia, y ordenaron al alguacil que, amarrado codo con codo, llevase á la cárcel al tuno del organista, el cual protestaba con esta badajada, propia de un trufaldín: —Dios no entiende de música terrena, y para él da lo mis- mo una tonada que otra.
Los jueces no tuvieron tiempo para deliberar, pués la ciudad les aturdió con su clamoreo. Aceptado, aceptado; la muerte del dragón bien valía la gracia de un
tuno.
Vicente Blasco Ibáñez