A la entrada del recinto se levantó un amplio porche tetrástilo con vano central de medio punto que alberga en un hueco menor dos pesadas hojas de madera tachonadas en bronce.
Sus hombros, el torso y los brazos son también mucho más grandes que antes, y con las manos tachonadas que parecen casi robóticas en apariencia.
La verdadera cola es marrón oscura, mientras que las supracobertoras que forman la cola secundaria son doradas y tachonadas de ocelos con franjas azules, marrones y verdes.
El conde de Barcelona se llevó las espectaculares puertas de la Puerta de Pechina, forradas de cuero de buey y tachonadas con clavos de bronce, cuya última pista nos lleva a la capilla vieja de la Universidad de Barcelona.
Bajaba ya la noche, y las ruedas del coche,
tachonadas de estrellas, brilladores diamantes y centellas, detrás de las montañas resonaban; los pájaros callaban, dejando el campo yermo, cuando los pajes del galán enfermo en el alto desván hachas metían, que alumbrar la carroza prevenían.
Lope de Vega
Ved cómo el astro de la niebla fría pálido avanza hacia el cenit. La noche mueve a par suyo las nubladas alas tachonadas de estrellas; y van los Sueños en redor.
Los pórticos de los antiguos solares son de manufactura elegante y sobria, enmarcan enormes puertas talladas y tachonadas en bronce.
El Conjunto de los elementos topográficos provocados por repetidos movimientos tectónicos, afectados luego por un proceso intenso de erosión como consecuencia de los cambios climáticos y de la intervención del Hombre, determinaron un tipo de Paisaje Montañoso, cuyas altitudes, mínimas van de 2.200 msnm a los 3.400 msnm, con vertientes irregulares tachonadas de numerosos picachos y otros accidentes orógraficos tales cómo...
Las piezas, de metales preciosos afiligranados, estaban tachonadas con rubíes, zafiros, diamantes y esmeraldas sin tallar pero perfectamente lustrados, y algunos alcanzaban el tamaño de huevos de codorniz.
A diferencia de otros terópodos gigantes tenía un hocico muy largo y bajo, y quijadas estrechas tachonadas con unos cien dientes no muy agudos y curvados levemente hacia atrás.
Las mansiones coloniales se caracterizan por sus portadas con arcos de medio punto coronados en el Frontis con una cruz o por un escudo nobiliario; sus anchas y pesadas puertas de madera tachonadas con botones, mascarones y aldabas de bronce.