Él, entonces, de ciega calina su mente, Teseo, sembrando, de su olvidado pecho despidió todos los mandados que previamente con constante pensamiento retenía, y las dulces señas no alzando para su afligido padre, 210 salvo, al Erecteo puerto se mostró, que le viera.
Este don Lope, que espanto De las cortesanas era, Su oro gastaba en secreto Pródigamente con ellas, Y a pesar de su faz torva, De su voz ronca y severa, Y de su amor a las leyes Y timorata conciencia, Se le bailaban los ojos Al dar con una mozuela Morenilla y vivaracha, Desenfadada y resuelta; Y como hiciese su encuentro Por alguna callejuela Excusada y solitaria, Fingiendo tomar las señas De cualquier casa, tendía Por el embozo tras ella Los encandilados ojos, ¡Y qué cintura!, ¡qué pierna!
Quince días después de la escena que acabamos de referir, y a eso de las nueve de la mañana, muchísima gente ociosa presenciaba, en la calle de San Juan de Dios y parte de la de San Felipe de aquella misma capital, la reunión de dos compañías de migueletes que debían salir a las nueve y media en busca de Parrón, cuyo paradero, así como sus
señas personales y las de todos sus compañeros de fechorías, había al fin averiguado el Conde del Montijo.
Pedro Antonio de Alarcón
- ¡Y lo niegas! ¡Desvergonzada! ¿Crees que no me di cuenta de las
señas que te hacía y que tú le sonreíste?. - ¡Ay, cállate! La gente comienza a mirarnos.
Antonio Domínguez Hidalgo
De improviso se detuvo y comenzó a buscar por todas partes, aunque nadie aparecía. Hizo
señas a un automóvil de alquiler que en esos momentos transitaba por ahí para que se detuviera.
Antonio Domínguez Hidalgo
Y si bien todos fueron de parecer que con César debían dar muerte a Antonio, Marco Bruto lo contradijo severo, diciendo no convenía extender el cuchillo a otra vida que a la del tirano, porque no se difamase la acción con señas de guerra civil o venganza.
Los tiranos son grandes estudiantes de los semblantes; y el pueblo, cuando reinan, espía con atención las señas exteriores, para descansar la curiosidad ansiosa sin riesgo.
El Estado, con la participación solidaria de las familias y la sociedad, le garantizará el respeto a su dignidad humana, la equiparación de oportunidades, condiciones laborales satisfactorias, y promoverá su formación, capacitación y acceso al empleo acorde con sus condiciones, de conformidad con la ley. Se les reconoce a las personas sordas o mudas el derecho a expresarse y comunicarse a través de la lengua de señas venezolana.
Por consiguiente, señor, déme V. los mil reales, y yo daré las
señas de Parrón, el cual se ha quedado con mis tres duros y medio.
Pedro Antonio de Alarcón
Ella por señas, triste y suplicante, le ruega que se vaya y no haga estima, porque está allí con riesgo de la vida, y no hay modo que aquel castigo impida.
Así diciendo, el gitano se hizo conducir delante del jefe de los migueletes, y señalando a Manuel, dijo: - Mi Comandante, ¡ése es Parrón, y yo soy el gitano que dió hace quince días sus
señas al Conde del Montijo!
Pedro Antonio de Alarcón
-También yo quiero ser obediente... -añadió Angustias, después de apuntar el verdadero nombre del Capitán Veneno y las
señas de la casa de su primo-.
Pedro Antonio de Alarcón