De repente, la doncella me apretó entre sus brazos y comenzó una extraña canción, que yo no había oído hasta entonces y resonaba en toda la estancia con melancólicos acordes.
De cuando en cuando volvía la cabeza a mirar atrás, no como Héctor hacia su Andrómaca, sino que me parecía oír todavía fuera de puertas el ruido de los abogados y poetas del café del Príncipe;
resonaba en mis oídos la canturia monótona de nuestros actores cómicos; oía las silbas dadas a nuestros ingenios clásicos y románticos; perseguíame la deuda interior como un remordimiento; sin embargo, yo no la había arreglado; las reformas eran las únicas que no me perseguían: ellas debían de ser sin duda las perseguidas.
Mariano José de Larra
Embozados en las capas o sumidos en el cuello de piel del abrigo, los buenos señores discutían tenazmente, una semana entera, acerca de un plato mudéjar o de un díptico gótico. Allá fuera
resonaba la lucha y se encrespaba el oleaje del mundo.
Emilia Pardo Bazán
Estaba en una plaza donde crecía la yerba: En el ámbito desierto resonaba el martillo del herrador y el canto de una mujeruca que remendaba su refajo.
Esta nobleza, bien distinta de la que aplaudía a Terencio cuando
resonaba el teatro romano con aquel dicho del poeta: «Homo sum, nihil humani a me alienum puto», no podía dejar la silla a no ser que perdiese el rejón, la lanza, el guante o el sombrero, en cuyo caso no podía volver a montar sin haber dado antes muerte a la fiera y recobrado la prenda perdida.
Mariano José de Larra
Pero la cara de Emma volvía siempre a aparecérsele ante sus ojos y en sus oídos resonaba algo monótono como el zumbido de una peonza: «¡Y si te casaras!, ¡si te casaras!» Aquella noche no durmió, tenía un nudo en la garganta, tenía sed; se levantó a beber agua y abrió la ventana; el cielo estaba estrellado, soplaba un viento cálido, ladraban perros a to lejos.
Pie a tierra de dragones, y listo, ¡canejo! La voz del sargento
resonaba bronca y enérgica en la soledad del sitio. Ninguno replicó.
Eduardo Acevedo Díaz
Subieron todos la monumental y amplia escalera, entre dos filas de coraceros de la guardia, recorrieron luego con gran prosopopeya larga serie de áureos salones, en los cuales
resonaba agradable música de instrumentos de viento, y al fin se encontraron en el salón del trono, cuya disposición arquitectónica era inusitada y rarísima, porque la bóveda, que formaba el techo, no era una media naranja, sino dos, en medio de las cuales había una estrechura, y en medio de la estrechura, una hermosa claraboya redonda por donde entraba la luz cenital que todo lo iluminaba.
Juan Valera
No sabía lo que tramaba Zeus, quien había de causar nuevos males y llanto a los troyanos y a los dánaos por medio de terribles peleas. Cuando despertó, la voz divina
resonaba aún en torno suyo.
Homero
Al mismo tiempo que tal súplica dirigía Antonieta al Eterno en el cielo, el demonio bramaba en el infierno, y el acento del Ángel resonaba en el espacio y decía: -¡Réprobo!
Pero no perdía nunca el sentido claro de la distancia que faltaba por recorrer. Por fin, se acercaban las casas de ladrillos, la tierra resonaba bajo las ruedas.
Pronto trabaron alrededor del cadáver de Alcátoo un combate cuerpo a cuerpo, blandiendo grandes picas; y el bronce
resonaba de horrible modo en los pechos al darse botes de lanza los unos a los otros.
Homero