En cocimiento de un buen puñado de planta dejando que hierva un cuarto de hora, el líquido se toma en cuatro tazas repartidas durante el día para facilitar la expectoración y fluidificar los esputos. También se recomienda en las diarreas, hemorroides y afecciones de la vejiga urinaria.
embarazo, sobre todo en las últimas semanas; Las molestias más comunes que causan las hemorroides son fáciles de sentir: sensación de ardor en el recto, comezón, humedad anal constante, dolor, sangrado al evacuar (aunque no siempre sangra), manchado de la ropa interior, y sensación de salida de alguna protuberancia por el recto.
En tiempos de Plinio se empleaba como anestésico dándole al paciente un pedazo de raíz para que la comiera antes de realizar una operación. Se usa para quitarse las legañas y almorranas mejor conocidas como hemorroides.
852-853 Además estaría indicada, sospechosamente, para casi todos «los males», tales como la conjuntivitis - ya que el agua de aciano ayuda a eliminar las secreciones y a que desaparezca la congestión ocular - blefaritis, reumatismo, dispepsias hiposecretores, anorexia, gripe, resfriados, fragilidad capilar (canas), arteriopatías, flebitis, edemas por insuficiencia venosa, hemeralopía, hemorroides...
A menudo, las inflamaciones de las hemorroides son consecuencia del esfuerzo para evacuar el intestino, aunque pueden ser causadas por otros factores como el embarazo, el estreñimiento crónico, la diarrea o el envejecimiento.
El principal síntoma de las hemorroides es el dolor alrededor del ano y sangre roja brillante en las heces, en el papel higiénico o en el inodoro (retrete).
Las hemorroides también pueden trombosarse. Las hemorroides internas se originan desde el plexo hemorroidal superior y están cubiertas por mucosa proximal a la línea dentada.
File:Piles Grade 1.svg Hemorroides grado 1 File...
Las hemorroides patológicas se dividen en internas, si se encuentran por arriba de la línea pectínea o dentada del conducto anal, y externas las que se encuentran distales o por abajo de la línea dentada.
Las hemorroides internas se clasifican en cuatro grados. Grado I: En el primero de ellos, la hemorroide se localiza en el tejido submucoso sobre la línea dentada.
Grado III: En las de tercer grado salen al defecar, y el paciente debe reintroducirlas manualmente. Grado IV: En las del cuarto grado, las hemorroides son irreductibles y están siempre prolapsadas.
Para aplicación tópica, impermeabilizan las capas externas de la piel y las mucosas, y protegen las subyacentes, además de producir un efecto vasoconstrictor. Se utilizan para el tratamiento de afecciones de la piel, heridas, quemaduras y hemorroides.