Luego que se esparció la triste noticia en la población, principiaron las visitas de los curiosos, más que de los piadosos, a frecuentar la pieza convertida en capilla donde el reo se hallaba descansando en su duro lecho, que él mismo con solícito cuidado había ayudado a transportar desde el calabozo en que permaneció engrillado durante dos años, dos meses i veintidós días!.
En la guerra le contesté, el que combate está libre y no engrillado como ese pobre joven, tiene la esperanza de vencer y no la horrible realidad de una muerte infalible.
El virrey, de muy mala gana tuvo que aceptar esa designación. Abreu fue apresado y engrillado por su sucesor Lerma, y murió en la cárcel.
Un mes después, Velasco autorizó al hermano de José Ildefonso, el capitán de Miñones Juan José de Machain, a visitar a su hermano en prisión. A partir de entonces fue engrillado.
Rawson es mandado a perseguir y es encarcelado, siendo encerrado en la cárcel de San Clemente. A pesar de que sólo estuvo preso quince días, fue engrillado y torturado.
Otras hipótesis afirman que Fernando de la Mora falleció engrillado La Ordenanza del 6 de octubre de 1923 de la Municipalidad de Asunción resolvió prestar homenaje al prócer, instituyendo su nombre a la larga avenida que comienza en la calle General Santos hasta la Avenida Defensores del Chaco.
Permaneció preso, engrillado e incomunicado por seis meses, hasta que en 1839 consiguió escapar y pasar a la Banda Oriental y de allí a la provincia de Entre Ríos, donde se incorporó al ejército de Lavalle.
Horianski, 1978 “De San Fernando a la Resistencia”, 1978 “Breve Historia Política y Económica del Chaco”, 1978 “Historia de la Provincia del Chaco”, 5 volúmenes, 1- El Chaco Primigenio, 2- Los Fundadores, 3 – La Conquista del Desierto, 4- Los pioneros, 5– Chaco Territorio y Chaco Provincia, 1979 “Yuchán”, 1980 “El Capitán Engrillado - José María Avalos”...
Fue tomado prisionero y engrillado durante seis meses por orden del tirano Diego Portales, por participar en un complot urdido por el general Ramón Freire desde su destierro en el Perú; además se le condenó al destierro de 10 años, por lo que se trasladó a Lima, Perú.
El capitán Ignacio Warnes, secretario de Belgrano, llevó el parlamento, pero fue apresado por Pablo Thompson, jefe de un destacamento paraguayo de 500 hombres apostado en la margen opuesta del río y remitido engrillado a Asunción, desde donde fue enviado a Montevideo.
Es arrestado en 1794 y es acusado de ser un enemigo de la Revolución francesa. Engrillado en Tarbes por siete meses, escapa de la guillotina.
Posteriormente se enemistó con el gobernador Hernando de Lerma por no haber cumplido una orden suya, consistente en aprehender a fray Francisco Vázquez, administrador del obispado, y a Francisco de Solís. Lerma lo hizo arrestar y lo tuvo engrillado junto a los capitanes Santos Blázquez, Juan Rodríguez Juárez y Pedro de Villarreal.