Desde entonces se lanzó, con la pasión de los niños en libertad, a balbucir palabras, que no entendía, del nuevo vocabulario político; a las manifestaciones públicas; al club y a las urnas electorales, siendo muy de advertir que en este entusiasmo iban siempre delante las hembras, las cuales hubieran llegado a emular las glorias de las calceteras de Robespierre, si las circunstancias lo hubieran exigido.
El que resistir pudo 695 al animoso Austro, al Euro ronco, chopo gallardo, cuyo liso tronco papel fue de pastores, aunque rudo, a revelar secretos va a la aldea, que impide Amor que aun otro chopo lea. 700 Estos árboles pues ve la mañana mentir florestas y
emular viales, cuantos muró de líquidos cristales agricultura urbana.
Luis de Góngora y Argote
Por vosotros, por vuestros altos hechos, por el nombre de vuestro caudillo Evandro, por las victorias que habéis ganado y por la esperanza que tengo de emular las glorias de mi padre, no pongáis vuestra confianza en la fuga; por en medio de los enemigos es preciso abrirnos camino con la espada, por allí donde más densa se ve su muchedumbre; por ese camino quiere nuestra noble patria que tornemos a ella vosotros y yo, vuestro capitán.
Y el mar también, que a mis absortos ojos dilátase sombrío, osó en aquellos remotos siglos emular las glorias de la vecina tierra.
Ni merecía menos la suerte incomparable que le cupo de haber conducido la Medicina Española al término de cultura y esplendor con que pudo ya emular la docta simplicidad de la escuela Griega.
Y esto me consta porque siento esparcirse sus cenizas y rugir de ira sus espíritus cada vez que las turbas los invocan como herederos de sus glorias; siento con cuánta saña y con qué valor desenvainarían el ya roñoso sable para romper todo círculo de parentesco con un pueblo iluso y deslumbrado que pisa y profana lo que ellos más veneraron; con unos próceres que hacen de la deslealtad y de la sedición un título de gloria y arrojan e insultan al Dios y al monarca propios, para brindar la nación entera a los derviches de Mahoma y a un príncipe extranjero, que la desdeñan porque la desprecian. ¿A qué, pues, repito, ese afán de querer emular, con la rebelión de Cádiz, las glorias del Dos de Mayo?
Las ocho palabras son estas: í, bien, ansí de buen ayre, descrédito, desaseada, cede, aplaudir, anhelar. Dánseles por aforro y acompañadas las siguientes: Galante, fino, sazon, emular, lo cierto es, esfuerzos, exemplos, aunque.
Incipit culti gratia Hilban perpetuo de dislates, sin salir de las ocho palabras en todas materias, quando la doña Tal Latiniparla, suelta la taravilla y dice así: Aunque ceda el descrédito, es galante la fineza, si aplaudida anhela; sí bien emular es desaseo de poca sazon: así, mas no dexa de ser galante por fino; y lo cierto es así, que no se está de buen ayre en el descrédito; así por aplausos de la emulación; así cedida a los esfuerzos desacreditados en lo galante de mejor ayre, si bien desacreditan esforzados así.
Pero aún tenemos mucho que hacer. Innovamos mucho menos que naciones como Finlandia e Irlanda, economías pequeñas y pujantes que aspiramos a emular.
Luchaban los Orientales y Argentinos estimulándose recíprocamente en actos de impavidez y ganosos por igual de emular las mayores hazañas épicas.
En el otro extremo se sitúan los ordenadores que, mediante software y sus periféricos estándar, son capaces de emular un fax, del Grupo 2 al Grupo 4 inclusive.
Es posible llegar a emular muchas de las características que proporcionan las clases en lenguajes orientados a objetos tradicionales por medio de prototipos en JavaScript.; Funciones como constructores de objetos: Las funciones también se comportan como constructores.