La Catedral Vieja y en menor grado las iglesias de Santiago y San Salvador son el exponente de las fase alfonsina del románico conimbricense.
En secreto, se elige la nueva dirección con Eduardo de Abreu, Jacinto Nunes, Sebastião de Magalhães Lima y Gomes da Silva. Además, Joaquim Martins de Carvalho, director del diario O Conimbricense se adhirió al partido.