La cobertura original estaba formada por cerchas de bronce, con perfiles en forma de U, según las describió Andrea Palladio. Una versión dice que fueron expoliadas por el papa Urbano VII, que mandó fundirlas para fabricar cien cañones para el Castillo Sant'Angelo.
Se hicieron, entonces, bóvedas vaídas como las que se encontraron, usándose incluso algunas de las cerchas que fueran removidas anteriormente como plantillas para cortar la nueva madera.
La cubierta a dos aguas está soportada por cerchas de madera, apoyadas sobre una estructura muraria que apoya por medio de arcos en las columnas.
Destaca la fachada de ladrillo visto rematada con una arcada de medio punto. El salón, de planta rectangular, tiene una cubierta de tejas apoyadas en cerchas metálicas y contrafuertes de obra.
Con tres naves privadas de crucero y con tres ábsides, estaba cubierta antiguamente por cerchas de madera, que fueron sustituidas por bóveda de arista solo en el siglo XV.
Coincidiendo con esta fase o alguna de las anteriores, o incluso en fase independiente, se aprecia el recrecido en altura de los muros perimetrales, de manera que permite colocar las cerchas de madera salvando las bóvedas.
La cubierta se construye a base de una serie de cerchas dispuestas transversalmente y apoyadas en los muros perimetrales; las cerchas están ejecutadas en escuadrías de madera y soportan correas y cabrios que sustentan una cobertura de enlatado y teja plana cerámica.
El sistema de celosía consistía en seis cerchas dispuestas en el lado largo del núcleo, y cuatro en el lado corto, que unían el núcleo central con el entramado perimetral del edificio.
La estructura está formada por cerchas y arcos de celosía metálica realizadas mediante perfilería compuesta por uniones roblonadas, y tornillos en los enlaces con los pilares de fundición que soportan la cubierta, con alturas de 8 y 5 m, con capitel y base ornamentada.
Está estructurado por cerchas tridimensionales de tubo redondo de acero, de color blanco, y cerrado por un ventanal de vidrio verde-azul, que regula el paso de la luz desde el exterior.
Los distintos niveles se comunican visualmente mediante patios contrapeados. La cubierta se compone de cerchas mixtas en madera laminada y acero, con cerramientos en panel de viruta reciclada.
Se puede hablar de una tipología: bóvedas en la planta baja o semisótano, pilares de sillares o ladrillos en la planta primera, y planta superior diáfana que deja ver las cerchas articuladas que sustentan la cubierta.