Desde Santo Domingo y posteriormente Cuba se iniciaron grandes expediciones a tierra firme, que exploraron, cartografiaron y luego colonizaron amplios territorios.
Se cartografiaron en detalle, por ejemplo, las alineaciones magnéticas en el océano Atlántico, que serían de gran utilidad para la navegación intercontinental.
En su libro 1421, el británico Gavin Menzies afirma que las flotas chinas de Zheng He cartografiaron casi todo el mundo en las primeras décadas del siglo XV y que luego sus mapas llegaron a Europa por medio de una serie de intermediarios, entre los que destaca Niccolò dei Conti.
Paralelo a la línea de costa, se cartografiaron depósitos palustres constituidos por limos, arcillas, arenas, sales y materia orgánica en descomposición.
En la primavera se dirigieron hacia el oeste, y buscaron los pasos de montaña al oeste de la moderna Irricana Palliser y Sullivan cartografiaron el paso Kananaskis Norte y el paso Kootenay Norte (un paso a 1.775 m de altitud que cruza las montañas Selkirk) antes de regresar a Fort Edmonton para pasar el invierno.
En la segunda expedición a Kamchatka, a partir de 1733, los hombres al mando de Bering cartografiaron sistemáticamente toda la costa de este mar.
Tapices microbianos Los geólogos Jim McAllister y Allen Agnew cartografiaron el área en 1948 y publicaron el primer artículo sobre las rocas deslizantes.
Los neerlandeses se mantuvieron en las tierras del estrecho durante un mes completo debido a que los vientos contrarios no les permitían avanzar, y se dedicaron a explorar aquellas costas de Tierra del Fuego, levantar cartas hidrográficas (cartografiaron las islas Hermite.) y recabar noticias sobre los nativos y sus costumbres.
El 5 de abril de 1732, Iván Fiódorov, Mijaíl Gvózdev y Kondrati Moshkov a bordo del navío Sviatói Gavriil (San Gabriel), partieron del cabo Dezhneva, arribando rápidamente al cabo del Príncipe de Gales, ya en las costas alaskeñas, que cartografiaron antes de volver de regreso.
Se cree que el mapa demuestra que los exploradores vikingos descubrieron y cartografiaron el Nuevo Mundo antes de que Cristóbal Colón lo hiciera en 1492.
De 1871 a alrededor de 1893 varias expediciones rusas militar-científicas cartografiaron la mayor parte del Pamir (Alexei Pavlovich Fedchenko, Nikolai Severtzov, el capitán Putyata y otros).
Los primeros navegantes occidentales al archipiélago fueron los holandeses, que en las varias expediciones en que participó Willem Barents (1594-97), cartografiaron y pusieron muchos de los nombres de los accidentes geográficos de las islas (cabos, golfos, bahías y penínsulas), aunque en el siglo XIX muchos de ellos fueron cambiados, aunque aún permanecen algunos.