La alteración de los músculos se refiere a un calambre doloroso y localizado que en ocasiones se asocia con otros problemas (embarazo, por ejemplo).
Esto se ve especialmente en el episodio en el que Weena padece un calambre mientras está tomando un baño y, a pesar de sus gritos de desesperación, sus semejantes no hacen nada por rescatarla.
Algunos tipos de distonía focal incluyen: Blefaroespasmo — Afecta los ojos Cervical (tortícolis espasmódica) — Afecta el cuello y hombros Oromandibular (distonía craneal) — Afecta la cara, boca, y o mandíbula Laríngea (disfonía espasmódica) — Afecta las cuerdas vocales De la mano (calambre del escribiente) — Afecta las manos y el antebrazo Del músico — Afecta cualquier parte del cuerpo que impida al músico la correcta ejecución de su instrumento En cuanto a la distonía focal del músico, los doctores Raoul Tubiana y Peter C.
La aventura mal aventurada de las narices tuvo para él, por consecuencia final, la de que su novia, que era una limeñita que calzaba zapaticos que parecían hechos por mano de ángel y para caminar sobre nubes, le expidiera pasaporte en regla y se echara a corresponder las carantoñas y cucamonas del Perico Carrosela, uno de los desnarizadores. La niña era de ésas que con sólo mirarlas, siente un cristiano
calambre en las piernas y temblor en la barba.
Ricardo Palma
hasta que le da un
calambre Y se cai a patalear, y a temblar muy fiero, hasta que se estira el salvaje; y, lo que espira, le sacamos una lonja que apreciamos el sobarla, y de manea gastarla.
Hilario Ascasubi
Y eya, largando el picazo, Respondió: -"Ansina, quién sabe". -Con que ya sabés, chiruza, La vieja está de mi parte, Y al viejo, si se retoba Puede que le dé... un
calambre... Y bale...
José Alonso y Trelles
Loiseau, en un rinconcito, se despachaba muy a su gusto, queriendo convencer a su esposa para que se decidiera a imitarle. Se resistía la señora; pero, al fin, víctima de un estremecimiento doloroso como un calambre, accedió.
¡Ni de talento hay destellos!… Y escriben comedias ellos como maestros de esgrima. Tajo aquí, cercén allá, ora a la regla, ora al gusto, cada escena nos da un susto si calambre no nos da.
¡mi oro!... Un horrible calambre contrajo todo su cuerpo y ahogó la voz en su garganta. -En nombre del cielo -exclamé, asustado de aquella agitación desesperada- ¡Samuel!
Por los años de 1756 era virrey del Perú el conde de Superunda; oidor de la Real Audiencia de Lima don Gregorio Núñez de Rojas, y alcalde de este Cabildo don Juan Antonio de Palomares y de la Vega, Fernández de Córdova y Pérez de lo Ríos, vizconde y preboste de San Donás, barón de Urpín y señor de Verdalla, en los reinos de Irlanda, mozo gallardo, rico, afable y rumboso, condiciones que lo hacían muy querido y popular en la ciudad. En cuanto a su señoría el oidor Núñez de Rojas, era un viejo más feo que un
calambre, solterón y antipático.
Ricardo Palma
Cosa no puedo comer aunque me muero de hambre, tómame tan gran
calambre qu'es dolido de me ver: gran temblor y gran tremer, muy gran pasmo y calofrío.
Juan del Encina
La cafeína es diurética (es decir, aumenta la producción de orina). Calambre Golpe de calor Sales de rehidratación oral MedlinePlus