Abierta en la fachada sur, la puerta de acceso aparece enmarcada por un arco de medio punto en cantería muy clasicista, con adornos de baquetones cajeados en las jambas, junto con otras molduras que forman la rosca del arco.
Sobre un cornisamento denticulado descansa una bóveda semiesférica, compartimentada por ocho nervios cajeados que emergen de un medallón central, con jugosa decoración de acantos que derrama flores y hojas de helechos sobre los segmentos.
La bajocubierta presenta en el tramo central dos riostras inclinadas hacia el eje de la fachada con un cierre de tablazón por encima del antepecho y dos pequeños vanos en los laterales. El alero ha perdido los jabalcones originales pero se conservan sus cajeados.
El segundo cuerpo presenta óvalos y rectángulos cajeados y, en las esquinas como elemento decorativo, unos sencillos jarrones que se ubican ante pequeñas hornacinas.
Entre ambas estancias, una rampa tallada en la roca, con restos de cajeados para apear la escalera de fábrica, daba acceso al piso superior, en el que aparecen una estancia cuadrada y una gran cisterna o bodega excavada en el subsuelo.
La portada principal es de arcos apuntados, abocinando algo la entrada, con columnillas, rematada con un arco conopial con escudos, florones y rosetones labrados dentro de los paños cajeados por un alfiz, que se remata con un friso labrado en la piedra.
Es la típica decoración vegetal en donde se muestran hojas de acanto, cintas, ovas, zarcillos, roleos de curvas y contracurvas, que se aplica principalmente en un sutil relieve dentro de las pilastras o columnas y es empleado también dentro de las capillas de iglesias y catedrales como se puede apreciar en el retablo mayor de la iglesia de la Colegiata de Gandía (1502-1508) en los frentes de los pilares cajeados.
Cruzando la calle Mayor, la calle Dorremonea lleva a un edificio noble edificado en sillar, con la fachada recorrida por 2 impostas lisas y con puerta principal de medio punto bajo balcón con enmarques cajeados y alero moldurado.;Parroquia de la Asunción Fue levantada hacia 1636 por los maestros Juan de Bulano y su hijo Juan Ruiz de Bulano.
Es totalmente lisa, con campanario de un solo vano, entre pilares cajeados; al lado, también con traza de Vergara, se construyó un pórtico, hoy desaparecido, pero que todavía existía en 1804, cuando se colocaron en él unas rejas de Juan Francés, procedentes de la iglesia de San Andrés, que hoy se encuentran en el callejón situado a los pies de la iglesia.
En el nivel inferior hay un pórtico compuesto por dos arcos de medio punto y tres vanos adintelados de gran tamaño. Unos y otros apean sobre pilares cajeados.
La puerta de ingreso está flanqueada por dobles pilastras de orden toscano sobre pedestal corrido, con fustes cajeados y adornos de círculos rehundidos.
El camarín mayor o torre-camarín, elevado sobre un basamento cuadrado con los paramentos cajeados, se resuelve como un destacado volumen de dos pisos prácticamente independiente.