Es maltratada por la señora y acosada sexualmente por el señor, que ella rechaza y que irá entonces a consolarse sórdidamente con la cocinera Marianne, una pobre chica a quién el señor Lanlaire dejará embarazada.
Tommy, que además de los traumas aparentemente psicológicos, es autista, sufrirá una niñez y adolescencia difíciles y llenas de penurias, hasta que debido a sus singulares características se convertirá en estrella mundial del pinball e ídolo de masas, iniciando un culto que será sórdidamente administrado por sus parientes.
Dondequiera que haya dos malvados, no hay ni persona, ni derecho, ni autoridad, ni potencia, al abrigo de un complot, es decir, de algún tipo de atentado o plan sórdidamente concertado.