En el año 1356, Used fue prácticamente destruido y a finales de 1357 sus vecinos se tuvieron que refugiar en el castillo de Cubel.
Los chozos son construcciones abovedadas, de planta circular o cuadrada, que sirven para refugiar de la lluvia a los pastores a los que les sorprendía en mitad del campo.
France se enteró de su verdadero significado (una alegoría de la felación) mientras estaba de gira, lo que la hirió al punto de romper su relación laboral con Serge, y busca refugiar su interés artístico momentáneamente en Alemania.
En uno de esos pasos alpinos se fundó en el año 1049 el Hospicio del Gran San Bernardo, para ayudar, asistir y refugiar a los caminantes que transitaban por el paso.
Uribe Uribe, enterado de esto, tomó la indefensa Medina y salió al encuentro de sus hombres, momento en que obtiene la victoria de Gachalá, lo que fuerza al gobierno a detener su persecución y refugiar a sus hombres en Villavicencio.
Al haber hecho esto los pobladores se rebelaron contra Moctezuma, no teniéndole nadie respeto. Los españoles se tuvieron que refugiar en los alojamientos del palacio.
Luego cruzaron el río de San Cristóbal y atacaron a otro grupo indígena que se había tratado de refugiar en la cima de un cerro en la zona de Táriba.
la flota seléucida se enfrentó a la romana cerca de Córico o Mioneso, donde el almirante seléucida Polixénidas fue derrotado y se tuvo que refugiar en Éfeso.
En 1811, ya derrotado por los colombianos, se tuvo que refugiar en la ciudad de Lima, donde llegó con tan solo veinticinco hombres.
El país estaba muy poco equipado para enfrentarse a una campaña de bombardeo estratégico, y el número de refugios antiaéreos estaba muy por debajo de lo requerido, forzando a las autoridades londinenses a usar alrededor de 80 estaciones del Metro de Londres para refugiar a unas 177.000 personas.
Los dos ciclistas trabajan a menudo conjuntamente (cooperación mutua) compartiendo la pesada carga de la posición delantera, donde no se pueden refugiar del viento.
En 1357 el ejército castellano destruyó las villas de Trasobares y Calcena, teniéndose que refugiar sus habitantes en el cercano castillo de Tierga, aguas abajo del Isuela.