4 Desde el desierto y este Líbano hasta el gran río Eufrates, toda la tierra de los Hetheos hasta la gran mar del poniente del sol, será vuestro término.
4 Voz de Jehová con potencia; Voz de Jehová con gloria. 5 Voz de Jehová que quebranta los cedros; Y quebrantó Jehová los cedros del Líbano.
El primero fue Egipto, luego Arabia, después Kuwait, Líbano, Sudan, Kenia, Etiopia, Zanzíbar, Tanganika, que hoy es Tanzania, Nigeria, Ghana, guinea, Liberia, Argelia.
2 Esta es la tierra que queda; todos los términos de los Philisteos, y toda Gessuri; 3 Desde Sihor, que está delante de Egipto, hasta el término de Accarón al norte, repútase de los Cananeos: cinco provincias de los Philisteos; los Gazeos, Asdodios, Ascalonitas, Getheos, y Accaronitas; y los Heveos; 4 Al mediodía toda la tierra de los Cananeos, y Mehara que es de los Sidonios, hasta Aphec, hasta el término del Amorrheo; 5 Y la tierra de los Gibleos, y todo el Líbano hacia donde sale el sol...
Mas, para que todas estén seguras de mi buen deseo, determino de jurar como católico y buen varón; y así, juro por la intemerata eficacia, donde más santa y largamente se contiene, y por las entradas y salidas del santo
Líbano monte, y por todo aquello que en su prohemio encierra la verdadera historia de Carlomagno, con la muerte del gigante Fierabrás, de no salir ni pasar del juramento hecho y del mandamiento de la más mínima y desechada destas señoras, so pena que si otra cosa hiciere o quisierse hacer, desde ahora para entonces y desde entonces para ahora, lo doy por nulo y no hecho ni valedero.
Miguel de Cervantes Saavedra
Le habló al pueblo de Afganistán, al pueblo del Líbano, al pueblo de Irán le digo, al pueblo del Líbano le digo, al pueblo de Afaganistán le digo.
3 Y fué, que á los cuarenta años, en el mes undécimo, al primero del mes, Moisés habló á los hijos de Israel conforme á todas las cosas que Jehová le había mandado acerca de ellos; 4 Después que hirió á Sehón rey de los Amorrheos, que habitaba en Hesbón, y á Og rey de Basán, que habitaba en Astarot en Edrei: 5 De esta parte del Jordán, en tierra de Moab, resolvió Moisés declarar esta ley, diciendo: 6 Jehová nuestro Dios nos habló en Horeb, diciendo: Harto habéis estado en este monte; 7 Volveos, partíos é id al monte del Amorrheo, y á todas sus comarcas, en el llano, en el monte, y en los valles, y al mediodía, y á la costa de la mar, á la tierra del Cananeo, y el Líbano, hasta el gran río, el río Eufrates.
Jueces 3 1 ESTAS, pues, son las gentes que dejó Jehová para probar con ellas á Israel, á todos aquellos que no habían conocido todas las guerras de Canaán; 2 Para que al menos el linaje de los hijos de Israel conociese, para enseñarlos en la guerra, siquiera fuese á los que antes no la habían conocido: 3 Cinco príncipes de los Philisteos, y todos los Cananeos, y los Sidonios, y los Heveos que habitaban en el monte Líbano: desde el monte de Baal-hermón hasta llegar á Hamath.
23 Y oré á Jehová en aquel tiempo, diciendo: 24 Señor Jehová, tú has comenzado á mostrar á tu siervo tu grandeza, y tu mano fuerte: porque ¿qué dios hay en el cielo ni en la tierra que haga según tus obras, y según tus valentías? 25 Pase yo, ruégote, y vea aquella tierra buena, que está á la parte allá del Jordán, aquel buen monte, y el Líbano.
32 Y propuso tres mil parábolas; y sus versos fueron mil y cinco. 33 También disertó de los árboles, desde el cedro del Líbano hasta el hisopo que nace en la pared.
6 Manda pues ahora que me corten cedros del Líbano; y mis siervos estarán con los tuyos, y yo te daré por tus siervos el salario que tú dijeres: porque tú sabes bien que ninguno hay entre nosotros que sepa labrar la madera como los Sidonios.
7 Y dieron dinero á los carpinteros y oficiales; asimismo comida y bebida y aceite á los Sidonios y Tirios, para que trajesen madera de cedro del Líbano á la mar de Joppe, conforme á la voluntad de Ciro rey de Persia acerca de esto.