Un mito, el primero en el tiempo, parecido al de otros antiguos caudillos surgidos de la nada, un funcionario semítico al servicio de Urzababa, rey de Kish, forma un partido con gentes de su estirpe, organiza un ejército, depone a Urzababa y levanta una ciudad que dará nombre a su pueblo y a su imperio. Accad o Agadé.