El odio y el deseo de venganza es un germen podrido que infecta nuestra sociedad, y tenemos el deber y la obligación de construir algo mejor y más digno para todos.
En esto se llegó a él un soldado bizarro, sobrino del alcalde, diciendo: -¿No veis cuál se ha quedado el gitanico
podrido de hurtar?
Miguel de Cervantes
Nueve años del gran Zeus transcurrieron ya; los maderos de las naves se han
podrido y las cuerdas están deshechas; nuestras esposas e hijitos nos aguardan en los palacios; y aún no hemos dado cima a la empresa para la cual vinimos.
Homero
Un pajarillo, dentro de una jaula tan chica como él, hace un ruido monótono saltando desde el palito al suelo y del suelo al palito; pero no canta ni silba. En la habitación reina un olor extraño a insano a cuero podrido, a manzanas guardadas y a libros apolillados.
Desde El sueño de las calaveras, de Quevedo, hasta el Obispo
podrido, de Valdés Leal, y desde la Marbella del siglo XVII, muerta de parto en mitad del camino, que dice: La sangre de mis entrañas cubriendo el caballo está.
Federico García Lorca
Muza, el usurero, para contrarrestar el maravilloso tufo a queso
podrido y a residuos que flotaba en el aire, tenía junto a la muralla dentada un jardín extendido, apretado de limones, con "parterres" tupidos de claveles y rosales, que cinco esclavos del aduar de Mhas Has cuidaban diligentemente, mientras Muza, plácido como un santón, se mesaba la barba y miraba venir a sus clientes.
Roberto Arlt
Alguien me decía, hace unos meses atrás, que por qué no permitíamos que el sistema democrático –ese que llaman en Venezuela democrático–, madure, y yo le decía que, y aprovechando que he probado unos dulces de mango muy exquisitos aquí en La Habana, les ponía el ejemplo del mango, que en Venezuela se pierde porque no sabemos aprovecharlo, y le decía un mango madura cuando está verde, pero un mango podrido jamás va a madurar; de un mango podrido hay que rescatar su semilla y sembrarla, para que nazca una nueva planta.
Nada aceptaremos que venga del corazón podrido del mal gobierno, ni una moneda sola ni un medicamento ni una piedra ni un grano de alimento ni una migaja de las limosnas que ofrece a cambio de nuestro digno caminar.
Un tronco seco de encina o de pino, que la lluvia no ha
podrido aún, sobresale un codo de la tierra; encuéntranse a uno y otro lado del mismo, cuando el camino acaba sendas piedras blancas; y luego el terreno es llano por todas partes y propio para las carreras de carros; el tronco debe de haber pertenecido a la tumba de un hombre que ha tiempo murió, o fue puesto como mojón por los antiguos; y ahora el divino Aquileo, el de los pies ligeros, lo ha elegido por meta.
Homero
Volví a pasos lentos y precedido de Francisco, que entró con las bujías de un candelabro, encendidas para alumbrarme el camino. El nauseabundo olor era el de las últimas flores pedidas a Cannes, que al descomponerse, habían podrido el agua de los vasos.
¿Qué más decirse podría en tu alabanza y loor, después de decir que un día fuiste sin mancha, ¡oh María!, la Madre del Redentor? Corazón que ante tu planta no adore grandeza tanta, ¡muerto o
podrido ha de estar!
José María Gabriel y Galán
El doctoral miró con extrañeza el pobre pelaje de la mujer, y ella, comprendiendo el sentido de la mirada, balbució: -Yo soy cigarrera, y gano muy poco, que tengo mala vista, el Señor me consuele... Mi hermano,
podrido de onzas, y nunca un cuarto me da...
Emilia Pardo Bazán