Pero hoy la máquina estatal se ha convertido en un reloj de cristal cuyo mecanismo es visible; se ven girar las ruedas, se oyen sus chirridos, y uno se asusta del eje y del
volante.
Hans Christian Andersen
Pero estad sobre aviso que no habéis de comunicar con los dichos corregidores y justicias ni con ninguna otra persona, cosa alguna de lo susodicho, ni de lo que supiéredes de las dichas personas que prendiéredes, salvo guardarlo secretísimo y avisarme a mí dello con correo volante muy particularmente, y enviarme heis todas las escrituras y cartas que les tomáredes.
Luego la negra y el chimpancé. Yo iba junto al árabe que conducía el
volante. Quiero hacer constar que nosotros éramos las únicas personas que quedaban en la factoría.
Roberto Arlt
Y, ¡oh colmo del honor y de la amabilidad!, a las diez y media recibió el matrimonio un
volante de Mediánez en que decía: «Espéreme usted; voy yo a buscarle en mi coche, y a dar la enhorabuena personalmente a Juana.» A la cual se le cayeron las lágrimas al leer esto.
Leopoldo Alas
Camisa con escote y
volante era su corpiño; en primitiva desnudez lucía su brazo roñoso y amorcillado; tapábase las greñudas "pasas" con pañuelo de color rabioso que anudaba en la frente a manera de oriental turbante; sólo para ir al templo se embozaba en una mantellina, verdusca ya por el tiempo; a paseo o demás negocio callejero iba siempre desmantada.
Tomás Carrasquilla
San Martín ha puesto en Mendoza y San Juan tres mil hombres de toda arma, entre cívicos y tropa de línea y para esta ha dado la libertad a todos los esclavos de la provincia. De aquí le han ido algunos oficiales, seiscientos fusiles, alguna artillería volante y bastantes municiones.
Y engullida la humilde pitanza a la luz de la candileja de petróleo, velaba la señorita hasta las dos de la madrugada, volviendo patas arriba sus pingos, transformando el redingote en fígaro, el sombrero de campana en chambergo, lavando los guantes, almidonando un tantico el
volante fru-fru de las enaguas...
Emilia Pardo Bazán
En ese momento apareció el payaso Kiko de Eso, montado en un dragón volante que despedía llamas por el hocico y con el clásico jo, jo, jo gritó: -¡Ha llegado la hora definitiva!
—una mujer otoñal estrujaba su mente mientras afanosa hacía delirar las llantas de su automóvil deportivo desde un sudorosamente aferrado
volante.
Antonio Domínguez Hidalgo
Se agachó a recogerlo y en ese preciso momento, Miguelón se hizo tan Miguelito que se estampó en una de las páginas del libro que ahora se elevaba para ser parte de la biblioteca del maravilloso castillo volante.
¿La marca era una A? Pues Lerzundi decía:— Al canchón con el caballo, que esa A significa Artillería volante.— ¡Ern una B? Entonces el jamelgo pertenecía á Batidores montados.
— Las tropas de estas divisiones serán mandadas por el jefe de mayor graduación de cada una; pero todas bajo las órdenes del señor Subinspector General, Cabo Subalterno que ha de recibir inmediatamente las mías y las de los reales cuerpos de artillería e ingenieros por sus respectivos comandantes en jefe, que también las recibirán de mí; los individuos de estos destinados en el tren volante o puestos artillados y fortificados, estarán bajo las órdenes de los jefes comandantes de la división o puesto en que han de operar si no fueren superiores en grado, en cuyo caso les corresponde el mando excusándose toda disputa, que atrase el servicio.