Y estamos avanzando en las remodelaciones de los estadios de Calama, La Serena, Viña del Mar, Valparaíso, Rancagua, Concepción y Puerto Montt.
Las tierras no cultiva nadie, se mullen los cuellos de los novillos, no, humilde, con los curvos rastrillos se purga la viña, no la hoz atenúa, de los podadores, del árbol la sombra, 41 no el terrón arranca con la inclinada reja el toro, 40 sucia robín los desiertos arados recubre.
La vaca ama a su vaquero y por eso tanto esmero. La vaca se siente niña a la mitad de la viña. Quiere estar en la kermés y por eso así la ves.
Y ahora, madre, que tan sólo tengo las doce uvas de la Noche Vieja, hoy que exprimo las uvas de los meses sobre el recuerdo de la viña seca, siento que toda la acidez del mundo se está metiendo en ella, porque tienen el ácido de lo que fue dulzura las uvas de la ausencia.
Uvas del Tiempo que mi ser escancia en el recuerdo de la viña seca, ¡Cómo me pierdo, madre, en los caminos hacia la devoción de tu vereda!
Cogednos las raposas, que está ya florecida nuestra
viña, en tanto que de rosas hacemos una piña, y no parezca nadie en la montiña.
San Juan de la Cruz
2. Envió un siervo a los labradores a su debido tiempo para recibir de ellos una parte de los frutos de la
viña. 3. Ellos le agarraron, le golpearon y le despacharon con las manos vacías.
La Biblia (Nuevo Testamento)
Pero aquellos labradores dijeron entre sí: "Este es el heredero. Vamos, matémosle, y será nuestra la herencia." 8. Le agarraron, le mataron y le echaron fuera de la
viña. 9.
La Biblia (Nuevo Testamento)
¿Qué hará el dueño de la
viña? Vendrá y dará muerte a los labradores y entregará la
viña a otros. 10. ¿No habéis leído esta Escritura: La piedra que los constructores desecharon, en piedra angular se ha convertido; 11.
La Biblia (Nuevo Testamento)
SEGUNDA Va un estudiante un madrugón a una viña, vendimia a la mitad de ella, lleva un lagar en el estómago, topa con una fuente, y porque se lo pide el gusto bebe hasta hartarse: pícase la sed y deshácese en cámaras y págalo el ojo del culo.
311, dice: «En el año 1025, Zite Morielez vendió al Monasterio de Cardeña una viña por sesenta sueldos de plata y cinco que se gastaron en el Alvoroc.» El mismo, en el catálogo de palabras antiguas que trae al fin del tomo II, define así la palabra alvoroc: «robra que confirma la compra.» 3 : El doblón, en la Montaña, es una moneda imaginaria, equivalente a 60 reales.
Y dos otoños, en fin, después de lo referido, con unos calzones pardos, un chaquetón de lo mismo, una camisa de estopa y zapatos con clavillos, salió otra vez de su pueblo montado sobre un borrico, para volver a la tierra de la viña y del olivo, a ganar otros seiscientos con los azares sabidos.