Por un doblón de dos caras se nos muestra alegre la triste del procurador y de todos los ministros de la muerte, que son arpías de nosotras, las pobres gitanas, y más precian pelarnos y desollarnos a nosotras que a un
salteador de caminos; jamás, por más rotas y desastradas que nos vean, nos tienen por pobres; que dicen que somos como los jubones de los gabachos de Belmonte: rotos y grasientos, y llenos de doblones.
Miguel de Cervantes Saavedra
Así aseguraba su promesa ante la joven el puñal que no habría deshonrado ni el más infame
salteador, y atajaba a Satanás la cruz de la empuñadura.
Leopoldo Lugones
Entre tanto, queda abolida para los delitos políticos, y no podrá extenderse a otros casos mas que al traidor a la patria en guerra extranjera, al salteador de caminos, al incendiario, al parricida, al homicida con alevosía, premeditación o ventaja, a los delitos graves del orden militar y a los de piratería que definiere la ley.
«En verdad, en verdad os digo: el que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que escala por otro lado, ése es un ladrón y un
salteador; 2.
La Biblia (Nuevo Testamento)
Oseas 7 1 ESTANDO yo curando á Israel, descubrióse la iniquidad de Ephraim, y las maldades de Samaria; porque obraron engaño: y viene el ladrón, y el salteador despoja de fuera.
Salían en eso a un descampado, y el grupo subdividióse en tres parejas, según las órdenes de un jinete inmediato que indicó lugares de nombre desconocido: Las Estacas, El Despenao… Entonces comprendió ella, por esa voz, que no iba en brazos del
salteador, como creía.
Leopoldo Lugones
Entonces ellos tomaron el partido de descubrirlo todo a Napoleón, que sobre la marcha lo hizo llamarle a su presencia: "como, salteador, querías matar al gobernador!
Sus pocas palabras, quebradas de angustia con habilidad, su moderación suplicante, estrellábanse y estrellaríanse hasta el fin en su silencio de mármol. La audacia del
salteador iba a saber lo que era la dignidad, que aun indefensa había contenido ya su pasión infame.
Leopoldo Lugones
Luego, volviendo a hablar con su cautiva: –Desde que la vi allá, tendido en la sombra, resuelto a mi empresa de
salteador, comprendí que estaba perdido.
Leopoldo Lugones
Aunque una chica, pongo por caso, me quisiera, a cuenta que el padre me la concediese en matrimonio. Primero se la entregaba a un
salteador de caminos.
Emilia Pardo Bazán
Uno de los presentes, sacando la espada, hirió al siervo del Sumo Sacerdote, y le llevó la oreja. 48. Y tomando la palabra Jesús, les dijo: ¿Como contra un
salteador habéis salido a prenderme con espadas y palos? 49.
La Biblia (Nuevo Testamento)
, como les decimos por aquí. Según cuentan, era un salteador de la montaña Zona de bosques en los llanos. de San Camilo y de allá bajó hace algunos años, descolgándose de hato en hato, por todo el cajón del Arauca, hasta venir a parar en lo de doña Bárbara, donde ahora trabaja.