Con dicho embudo perforado, el nuevo sistema eliminaba los rodillos para el escurrido de bayetas y, en definitiva, simplificaba dicho sistema de escurrido y así sustituía cualquier mecanismo o articulación de dispositivos que aquel sistema exigía, por un simple retorcimiento del “mocho”, todo ello, con el acoplamiento al cubo de un embudo perforado desmontable o “de quita y pon”, es decir, que se puede quitar y poner sin estar fijo y permanentemente unido al mismo.
Las propias ballestas sujetan el puente y transmiten el empuje, controlan mediante su retorcimiento el par de reacción (tendencia del tren a girar sobre si mismo al acelerar o frenar y como una hélice sobre la transmisión) e incluso proporcionan cierto control antibalanceo.
Los brazos formados por láminas metálicas o ballestas cuartoelípticas estaban anclados sólidamente al puente en voladizo, de modo que transmitían el empuje a través de sus anclajes, controlaban el par de reacción mediante su retorcimiento y actuaban como barras estabilizadoras en conjunto con el propio puente, completando el sistema un tercer brazo de guiado lateral, generalmente una barra panhard.
Romeo y Julita Martínez, función con fantasma, 1946. Rato y medio de angustia, en colaboración con Mingote, 1947. Retorcimiento, 1947.