-No se lea la casa, que ya yo sé dónde es -respondió Monipodio-, y yo soy el tuáutem y esecutor desa
niñería, y están dados a buena cuenta cuatro escudos, y el principal es ocho.
Miguel de Cervantes Saavedra
O bien: cogen las confituras y, al hacerlo, se burlan de su niñería: penden de esa caña de paja que es su vida y se burlan de continuar pendiendo de una caña de paja Alusión a Pascal: «El hombre es una caña que piensa.» .
Si no, conocedlo en el que más dice que ama una mujer: hállela en una niñería, a ver si la perdonará, como Dios, porque nos ama tanto, nos perdona cada momento tantas ofensas como le hacemos.
Tal vez esto os parezca sueño de un loco… de nadie mis chocheces en mal redundan: a él no le conocieron ni a mí tampoco: que nos identifiquen, que nos confundan: que me amen vuestros niños: y cuando lleguen a ser ya grandecitos, cuando pregunten su historia y de saberla derecho aleguen, que los datos y señas delos dos junten; que cuando de su abuelo sepan la historia con la mía la fundan en su memoria: que cuando de él lindezas y bien les digan, que con él me recuerden y me bendigan, y cuando por él recen al acostarse, que también por mí recen cuenta sin darse; mi poesía que aprendan cuando crezcan Pepe y María. ¡Ya veis cuán llena está de niñería mi Noche Buena!