Ese vaho irradiado, de vago prestigio mil-y-una nochesco, ese vaho de turco, en suma que con un poco de cariño se ha podido ver que ha sido capaz alguna vez de ahogar el mismo olor del turco, prestigiado por una vocación de curiosidad, casi religiosa al milenario nocturno de Sharazada, y al narguilé más espirituoso de las música árabe, eso las acababa, las sumergía moribundas en un éter bochornoso y espeso.
Un hombre dice estrella Y hay un temblor en los espacios Un hombre dice Mar Y las olas se agrandan satisfechas Un hombre dice Selva Y los árboles comprenden su deber milenario Un hombre dice Viento Y todo se agita hasta la muerte Estrella yo no te pido tu destino Ni exijo mas aroma a la flor de la tarde Yo quiero solo una amistad de anchas orillas Un gran río profundo Que embruje mi país Y haga cantar las aguas dormiladas Que siempre creen olvidar su vida La calle del azar El punto mismo Donde se encuentran los designios Los ojos se adivinan Se entornan suaves Saben que juntos van a mirar las cosas Los labios se presienten Palpitan como flores que empiezan la jornada ¿Son besos?
En esta amenaza y en este ataque veía con razón el secreto del socialismo, cuyo sentido y cuya tendencia juzgaba ella más exactamente que se sabe juzgar a sí mismo el llamado socialismo, el cual no puede comprender por ello cómo la burguesía se cierra a cal y canto contra él, ya gima sentimentalmente sobre los dolores de la humanidad, ya anuncie cristianamente el reino milenario y la fraternidad universal, ya chochee humanísticamente hablando de ingenio, cultura, libertad o cavile doctrinalmente un sistema de conciliación y bienestar de todas las clases sociales.
Acabemos ya el viaje milenario por rejiones de idealismo sin consistencia i regresemos al seno de la realidad, recordando que fuera de la Naturaleza no hai más que simbolismos ilusorios fantasías mitolójicas, desvanecimientos metafísicos.
¿adónde esta tu Perfección Humana, para tenerte Fe? XXIV Eras un viejo Buda
milenario, eras una ficción y nada más, eras un espantajo innecesario: ni eras bien, ni eras mal.
Pedro Bonifacio Palacios
Acabemos ya el viaje milenario por rejiones de idealismo sin consistencia y regresemos al seno de la realidad, recordando que fuera de la Naturaleza no hay más que simbolismos ilusorios fantasías mitológicas, desvanecimientos metafísicos.
Pues aunque el latín parece que se ponen los tiempos indefinidamente y sin limitación, con todo, aquí están puestos en el número dual, del cual carecen los latinos, como le tienen los griegos, así también dicen que lo tienen los hebreos Dice, pues, tiempos, como si dijera dos tiempos; sin embargó, confieso que recelo nos engañemos acaso en los diez reyes que parece ha de hallar el Anticristo, como si hubiesen de ser diez hombres; y que así venga de repente sin pensarlo al tiempo que no, hay tantos reinos en el dominio romano Porque ¿quién sabe si por el número denario quiso significarnos generalmente todos los reyes, después de los cuales ha de venir el Anticristo, coma con el milenario...
El curso de la quebrada Las Lajas que atraviesa el cantón está rodeado de piedras muy pulidas (Lajas) en el Sitio La Moquillada, que significa oquedad en términos particulares, un recodo de la quebrada está protegida por una majestuosa pared de piedras pulidas superpuestas, y exactamente bajo ese capricho natural el milenario caudal ha tallado un canal en medio de la roca inundada por el agua en donde se pierde rugiendo para salir más adelante, Este impresionante conjunto natural es la Moquillada.
Y en tanto, la noche detendía por la gran llanura su sombra llena de promesas apasionadas, y los pájaros de largas alas volaban de las ruinas. Di algunos pasos, y con voces que repitió el eco milenario de aquellas ruinas, llamé al indio que me servía de guía.
CONTEMPLA Contempla el rosedal de mi zozobra –equinoccio de banderas mustias— marchitarse ante el recuerdo
milenario de tu cuerpo, tan mío...
Antonio Domínguez Hidalgo
Además, y en razón del enorme cúmulo de urgentes y sangrantes necesidades en las que vive el medio agrícola, a la vista de la plaga del paro estacionario campesino y del retraso y abandono milenario de esta clase; la C.N.T.
Este es el mar que se despierta como el llanto de un niño El mar abriendo los ojos y buscando el sol con sus pequeñas manos temblorosas El mar empujando las olas Sus olas que barajan los destinos Levántate y saluda el amor de los hombres Escucha nuestras risas y también nuestro llanto Escucha los pasos de millones de esclavos Escucha la protesta interminable De esa angustia que se llama hombre Escucha el dolor milenario de los pechos de carne Y la esperanza que renace de sus propias cenizas cada día.