Terminado el evento, el artista se quedó en París durante tres años, donde se empapó de las nuevas corrientes artísticas, aunque sin mellar su arraigado sentido peruanista.
Es necesario resaltar, que el Estado huari, fue integracionista como luego lo serían los incas; ello se debió probablemente, a la economía de retribución propia del territorio de las culturas prehispánicas peruanas como a una reacción, ante la amenaza natural de fenómenos climáticos cíclicos, que debieron mellar en forma catastrófica su producción y subsistencia.
Un exitoso corto publicitario pagado por la campaña de De la Sota, mostrando un gato que merodea alrededor de un pájaro enjaulado, explotó el asunto y empezó a mellar la imagen de Angeloz.
Más allá, a un maestro en las artes mágicas y el empleo de esta forma de encantamiento se le atribuçia el poder de mellar las espadas, hundir barcos en alta mar, atraer tormentas y decidir la victoria o la derrota en una batalla.