(Vase por la segunda derecha.) Escena VI Dichos menos el GOBERNADOR, luego UN CORTESANO. El Almirante Este hombre entiende la aguja de marear.
En este maldito país todos los hombres parecen dispuestos a
marear a todas las mujeres, y se diría que la que no les importa, les importa, y a la que no han visto jamás, la conocen de toda la vida.
Emilia Pardo Bazán
69.- Y de toda la Hidrografía se haga Padrón y Carta General de la Navegación, en la cual en demostración se ponga todo lo sabido de la Hidrografía y de la navegación que por ella se hace como antes de agora está mandado hacer y está hecho en la Casa de la Contratación de las Indias, a donde mandamos que siempre esté un original y otro en el Consejo Real de las Indias; por los cuales mandamos que se hagan e corrijan todas las Cartas de marear que se hubieren de dar a los Pilotos de la Carrera de las Indias...
En suma; el tal filósofo, en vez de profesar teología, ontología o cosmología, profesaba mundología, pero mundología elevada, quintaesenciada y sutil; sus alumnos aprendían de él la aguja de
marear más sensible y la gramática parda encuadernada en el tafilete de Esmirna más suave y bien curtida; y Ramiro Nozales, incitado por la fama que el filósofo iba ganando, se resolvió a consultarle y a oír sus lecciones, que en verdad le hacían buena falta.
Emilia Pardo Bazán
Este pequeño estrecho, tan poderoso, tan gritón, tan bebedor, capaz de sacar a uno de sus casillas, era un lugar de gran peligro para los antiguos navegantes holandeses, puesto que sacudía sus barcas en forma de bañera, deteniéndolas en remolinos capaces de marear a cualquiera que no fuera un holandés, o, lo que ocurría con frecuencia, colocándolas sobre rocas y restingas.
E la razón porque lo pido es porque tenemos noticia que la costa del Río de la Plata, desde cuarenta grados hasta la boca del Estrecho, es despoblada y temo va ensangostando mucho la tierra, porque cuando envié al piloto Juan Batista de Pastene, mi teniente general en la mar, al descubrimiento de la costa hacia el Estrecho, regiéndose por las cartas de marear que de Españ a tenía empremidas...
Y la razón porque lo pido es porque tenemos noticia que la costa del Río de la Plata, desde cuarenta grados hasta la boca del Estrecho, es despoblada y temo va ensagostando mucho la tierra, porque cuando envié al piloto Juan Bautista de Pastene, mi teniente general en la mar, al descubrimiento de la costa hacia el Estrecho, rigiéndose por las cartas de marear que de España tenía imprimidas...
Y despues de embarcados los bastimentos y ropa, no quedo a las varcas mas de un xeme de bordo fuera del agua : y allende desto yvamos tan apretados que no nos podiamos menear : y tanto puede la necessidad que nos hizo aventurar a yr de esta manera y meternos en una mar tan trabajosa : y sin tener noticia de la arte del
marear ninguno de los que alli yvan.
Álvar Núñez Cabeza de Vaca
Esperábamos ya alrededor de la mesa mi tía, mis dos primitas, que, en el vigor de la robustez y de la juventud, hubieran podido marear a un estoico con algo menos de rubor y con un poco más de coquetería, y el predicador que debía hacer el panegírico del santo aquel día.
Y quando vino la noche no quedamos sino el maestre y yo que pudiessemos
marear la varca, y a dos horas de la noche el maestre me dixo que yo tuviesse cargo della : porque el estava tal que creya aquella noche morir.
Álvar Núñez Cabeza de Vaca
Publicó en 1519 la Suma de Geographía que trata de todas las partes del mundo, sobre todo las Indias, y largamente del arte de marear.
(1972) Las columnas del mar (poesía) Cervantes en las investigaciones Cervantinas: Ensayo-Conferencia dictada en el Instituto Chileno de Cultura Hispánica de Valparaíso (1984) Libro de horas y agujas de marear (1989) A orillas del Mapocho: conferencias populares dadas en la tribuna pública del centro social católico...