Si él no hubiera formado tan malas ideas de matar a aquel hombre, no se hubiera armado la tempestad que tenía, que descargar luego sobre él, ni hubiéramos oído aquellos trémulos truenos, o, por mejor decir, aquellos risibles golpes de
mampara, a cuyo ruido lloran los niños en la cazuela, llueve como si frieran los cómicos la cena, etc., etc.
Mariano José de Larra
--- Y el sol por el firmamento a largo andar se venía, cuando llamó soñoliento desde su oscuro aposento el conde Sancho García. Montero, como le oyó, de la mampara al dintel atento se presentó, y tras algo que le habló cerróse dentro con él.
Llegados a la antesala, donde damas y señores acaso esperan audiencia con distintas pretensiones, al piloto dice el paje que allí lo espere, y entrose a dar parte a su señora de estar cumplida la orden. Vuelve al instante, y llamando al genovés, indicole la respetada
mampara que, en cuanto este entró, cerrose.
Ángel de Saavedra
No lejos de la casa, la rueda del molino giraba su cojera de tres paletas sobre un prisma de hierro oxidado, y más allá, sobre la caballeriza, se distinguían los cristales azules y rojos de una
mampara destruida por el orín.
Roberto Arlt
Doblóse detrás de Ibáñez la mampara en la pared; el ruido de sus pisadas se acabó al fin de perder, y aun le parece que le oye, que le abraza y que le ve; tanto el encuentro de Ibáñez fue a don Rodrigo placer.
Cuando se descorría la
mampara de hierro que tapaba el homo, las llamas enrojecían las paredes, y, su reflejo, resbalando por los tableros cargados de masa, coloreaba los blancos taparrabos y aquellos pechos atléticos y bíceps de gigante que, espolvoreados de harina y brillantes de sudor, tenían cierta apariencia de femenil.
Vicente Blasco Ibáñez
Sin cesar entraban y salían los concurrentes al espectáculo, perdiéndose detrás de la
mampara de tela bermeja que impedía ver desde la puerta lo que pasaba dentro.
Emilia Pardo Bazán
III - El secreto En un oscuro aposento que solamente alumbraban las luces de dos bujías en candeleros de plata, donde tiene su despacho el augusto rey de España, y donde a pocas personas se les permite la entrada, a su secretario Pérez Felipe segundo aguarda, pues que llegó a conocerlo al atravesar la plaza. A los muy pocos momentos cruje y se abre la
mampara, y Pérez entra en silencio, y mudo a su rey acata.
Ángel de Saavedra
Por los cristales de la
mampara penetraba gran claridad solar, y un súbito recuerdo de miseria me entristeció de tal forma que vacilé en responderle, pero con voz amarga lo hice.
Roberto Arlt
A semejanza de otras casas, el jardín florecido extendía sus canteros frente a la sala, y al llegar al camino de mosaico que conducía a la puerta vidriada de la
mampara se cortaba; luego continuaba formando escuadra a lo largo del muro de la casa ladera.
Roberto Arlt
Su mano iba a tocar el botón dorado de la mampara, cuando esta se abrió dando paso a una joven suntuosamente vestida, que al verlo retrocedió, con un ademán de gozosa admiración.
Despidiose el marqués y Vergara lo acompañaba a la sala; pero al llegar a ésta, volvió la cabeza hacia una
mampara que comunicaba al dormitorio de Evangelina, y al través de los cristales viola sollozando de rodillas ante una imagen de María.
Ricardo Palma