Las personas podrán asociarse y organizarse libremente para cualquier fin lícito, salvo en organizaciones militares o cuasi militares.
Todos estos antecedentes hacen lícito el planteamiento interrogante sobre las posibilidades de liberación de los pueblos a corto o mediano plazo.
No da a nadie parte en su oficio. Con la fábula de Faetón enseñó que a su propio hijo no le fue lícito, pues fue despeñado y convertido en cenizas.
Es verdaderamente sorprendente cómo se interesan todos por los éxitos afortunados de un hombre amado: se le anima, lo que no se haría si no se creyera que es lícito amar; ganarse el afecto del amado se considera bello y el no lograrlo como humillante.
Señor, no presumo que vuecelencia leerá este libro; prométome le recibirá. Séame lícito compararme conmigo: si todo lo que he escrito ha sido defetuoso, esto es lo menos malo.
Y cuando se querían reír, mandó a sus ojos que llorasen, y con llanto hipócrita y lágrimas mandadas disimuló el gozo y desmintió el miedo. Lícito es temer al enemigo para no despreciarle; mas temerle para sólo temerle, es infamia que aun en la cobardía de las mujeres halla honra que se le resiste.
Ahora de esto mismo me duelo: que a hambrear de ti y a estar sediento el chico aprenderá. Por lo cual cesa tú, mientras lícito es a tu pudor, no al final llegues, pero habiendo mamado.
Cómo no, a quien tan buena madre y tan saludable le vive, y tan atractiva hermana, y tan buen tío, y tan todo lleno de chicas, sus parientes: ¿por qué cosa él deje de estar magro, el que nada toque sino lo que lícito tocar no es?
Y podrá considerarse que existe este hábito si, habiendo declarado un individuo falsamente en dos o más juicios, sus antecedentes sospechosos, su falta de oficio o industria lícito y conocido, u otras circunstancias, lo hicieren suponer razonablemente.
Dijera aquí alguien: ‘A qué tú aquesto, puerta, sabes, a quien nunca de su dueño al umbral faltar lícito es, ni al pueblo auscultar, sino aquí, fijada bajo el dintel, sólo cerrar sueles o abrir la casa.’ 40 A menudo a ella he oído, con furtiva voz, hablando sola con sus doncellas estas sus desvergüenzas, por su nombre diciendo los que dijimos, cual capaz es la que, que yo, esperara, ni legua tenga ni oidillo.
No te es lícito llorar con demasía; y no es esto sólo lo que te es lícito, pues aun no lo es el extender el sueño a una mínima parte del día, ni lo es el huir de la muchedumbre de los negocios retirándote al ocio de tu jardín ni el recrear con algún voluntario paseo el cuerpo fatigado con la asistencia del trabajoso oficio, ni alentar el ánimo con la variedad de espectáculos ni disponer el día a tu albedrío.
Por defender el injuriado fuero ¿No es lícito la espada desnudar?» (167) Si entronizado el codicioso belga Saqueaba el palacio y la cabaña Y desangrando á la infeliz España Rios de oro enviaba á su nacion; Si reía en espléndido banquete Sirviéndole de música el gemido De un pueblo que por él empobrecido Moribundo imploraba compasion; Si al pedirle justicia el triste padre, Padre á quien deshonró vil cortesano, Decia el estrangero al castellano: 'Cómprame la venganza y la tendrás'; ¿Debió Castilla tolerar su afrenta?