Don Ricardo fue en vida un gran aficionado a la práctica del deporte y promotor de sus valores intrínsecos, era un asiduo concurrente de la tribuna preferente del viejo Estadio Nacional como también un gran jugador de bochas.
Fue empleado municipal en el viejo Mercado Central. Buen jugador de bochas, se descató en el Pronóstico Club jugando junto a su hermano Graciano.