En 1986, con tan sólo 16 años pero ya con mucha carrera a sus espaldas, protagonizó la que es una de sus películas más emblemáticas y por la que muchos la recuerdan, dando vida a la joven Sarah, en Labyrinth (Dentro del laberinto), junto al enigmático David Bowie, dirigida por Jim Henson.En el año 1990 filmó "Labios Ardiendes",film de corte erótico con Don Johnson el héroe de la serie de TV "Miami Vice",con quien se asegura que tuvieron una relación y vivieron un tiempo juntos.
Así, interpretó el turbio personaje de Milady en Los tres mosqueteros (1993) y un thriller erótico: Nunca hables con extraños, con Antonio Banderas.
El diseño del disco y la imagen de Velvetina han sido realizadas por el diseñador David Delfín. El video "Down With Love" fue censurado por su "alto contenido erótico" en México.
¿No es natural alguien que nació hermafrodita? ¿No es natural alguien que tiene un deseo y un rasgo
erótico y ama a otra persona de su mismo sexo?
Elisa Carrió
Ingente lira es cada bosque y arpegio cada rama florida, grato idilio cada vergel: naturaleza entona al erótico mayo himnos triunfales.
¡La última querida del hombre es la tierra! En Nicaragua la hija de Telus te espera, gran poeta de erótico prestigio; serás grano de oro en su gran sementera.
Después de relatar el primer sueño, dice el rey: «A continuación de este primer sueño desperté intranquilo y medité qué es lo que podía significar, pero luego volví a quedarme dormido y tuve otro sueño mucho más extraño, que me produjo aún más espanto y confusión.» Al terminar de escuchar el relato del faraón dice José: «Tu sueño; ¡oh rey!, es, en apariencia, doble, pero sus dos visiones poseen una misma significación.» En su Beitrag zur Psychologie des Gerüchtes, refiere Jung cómo un disfrazado sueño erótico de una colegiala fue comprendido y reproducido en diversas variantes por sus compañeras sin necesidad de interpretación ninguna...
La urna y otras historias de amor se constituye, así, dentro de la literatura mexicana, en una obra profunda e intensa, perfecta en su brevedad (el autor es un mago de la brevedad), que desmenuza con plena conciencia del distanciamiento erótico, los vericuetos del desamor.
Según don Justino, en materia de paladar erótico, era Bo- lívaí" como aquel bebedor de cerveza á quien preguntó el criado de la fonda:— ¿Qué cerveza prefiere usted que le sirva?
Es como un pequeño fragmento de El cantar de los cantares, o mejor diré del Gita-govinda, cuyos requiebros, ternuras y descripciones materiales pueden interpretarse por estilo ultramundano y trascendente. La composición además tiene en este caso una singularidad que no tiene ni el idilio erótico de los hebreos ni el de los indios.
La esencia de la fiesta: el cara a cara, el grupo de humanos que pone en común sus esfuerzos para realizar sus deseos, se trate de comida y bebida, baile, conversación o el arte de vivir; puede que incluso para el placer
erótico, o para crear obras de arte colectivas, o para atraer el puro circular de la alegría.
Hakim Bey
Y en su vaivén de delirios líricos, “Vorágine de los sentidos húmedos”, la sensualidad exige ir más allá del segundo carnal; imposible anhelo de un extraño misticismo erótico donde el ser amado es dios que se acerca y se distancia sin ser él, sino una esencia que a fuerza de desearse y poseerse, desaparece en el íntimo escombro de una nostalgia sin ruego; porque el hablante lírico de Esther Puhyol maneja temples de ánimo que nunca se arrodillan a suplicar compasión, sino que solazándose en lo que fue, como recuerdo incesante que no muere al borde del fin, vitalizado por la maravilla melancólica de las hormonas, se transforma en la palabra diáfana de reminiscencias: “Te echarás sobre mi sombra / como antes amante / en mi cuerpo...