Yo, continuó Eryximacos, comparto la indignación de Phaidros; quiero pagar, pues, mi tributo al Amor y ganarme su benevolencia. Me parece al mismo tiempo que a una compañía como la nuestra no le estaría de más honrar a este dios.
E igualmente puedo responder del resto de la compañía, aunque, si he de decir la verdad, la partida no es igual para nosotros que estamos sentados los últimos.
Tuvo también una sagrada estirpe de hijas que por la tierra se encargan de la crianza de los hombres, en compañía del soberano Apolo y de los Rios y han recibido de Zeus este destino: Peito, Admeta, Yanta, Electra, Doris, Primno, la divina Urania, Hipo, Clímene, Rodea, Calírroe, Zeuxo, Clitia, Idía, Pisítoa, Plexaura, la encantadora Galaxaura, Dione, Melóbosis, Toa, la bella Polidora, Cerceis de graciosa figura, Pluto ojos de buey, Perseis, Yanira, Acasta, Jante, la deliciosa Petrea, Menesto, Europa, Metis, Eurínome, Telesto de azafranado peplo, Criseida, Asia, la deseable Calipso, Eudora, Tyche, Ánfiro, Ocírroe y Estigia, la que es más importante de todas.
Y aseguró que si alguien había sido deshonrado y privado de dignidad por Cronos, accedería al rango y dignidades que es legítimo. Marchó entonces la primera la inmortal Estigia al Olimpo en compañía de sus hijos, por solicitud hacia su padre.
Pero así como el soltero que fue siempre juicioso cree de su deber, la víspera de sus bodas, despedirse de la vida libre con una noche de orgía en
compañía de sus amigos, de igual modo Benincasa quiso honrar su vida aceitada con dos o tres choques de vida intensa.
Horacio Quiroga
Luego otro día que fui levantado, el señor mi amo me tomó por la mano y sacóme la puerta fuera y, puesto en la calle, díjome: Lázaro, de hoy mas eres tuyo y no mío. Busca amo y vete con Dios, que yo no quiero en mi compañía tan diligente servidor.
Estos posaron la interrogadora mirada en el tío Cantales; después miró el de Alcalá de los Gazules al hijo ilustre de Teba, sonriéronse disimuladamente ambos, y: -Qué, ¿mos vamos pa allá en amor y compañía, no sea cosa que vayamos a tener un mal tropiezo por esos malos caminos?
Aunque libres, respirando salud y deteniéndose a mirarlo todo con sus grandes ojos de cachorros alegres, no hubieran sabido qué hacer un instante sin la
compañía del padre.
Horacio Quiroga
Al anochecer de una tarde oscura y tormentosa en el otoño de 18..., me hallaba en París, gozando de la doble voluptuosidad de la meditación y de una pipa de espuma de mar, en compañía de mi amigo C.
Y cuando lo tuvo terminado, era ya sábado. El Rey, la Reina y toda la Corte lo aguardaban para tomar el té en
compañía de la princesa.
Hans Christian Andersen
Pasó mucho tiempo, y el cuello fue a parar al almacén de un fabricante de papel. Había allí una nutrida
compañía de harapos; los finos iban por su lado, los toscos por el suyo, como exige la corrección.
Hans Christian Andersen
No tengo padre ni madre y soy pobre, pero Dios me ayudará. -También yo voy a correr mundo -dijo el forastero-. ¿Quieres que lo hagamos en
compañía? -¡Bueno!
Hans Christian Andersen