Pues tan gran estruendo se levantó cuando, tumbada ella, aquél se precipitó desde las alturas. ¡Tanto estruendo se produjo al chocar los dioses en combate!
Declinó la batalla; pero antes, atacándose mutuamente, luchaban sin cesar a través de violentos combates. Entonces aquéllos, Coto, Briareo y Giges insaciable de lucha, en la vanguardia provocaron un violento combate.
Pasando de tres a cuatro mil metros del Huáscar nuestro blindado, pudimos ser testigos de todos los incidentes del glorioso combate que terminó en la captura de aquel monitor.
A las ocho recibimos orden del comandante del Cochrane de empeñar combate con la Unión; seguimos entónces, como desde el principio, gobernando a cortarle la proa al enemigo; pero éste desde el primer momento nos mantuvo una distancia de cinco mil metros sin aumentarla, quizás para conocer nuestro andar y observar las peripecias del combate que se había trabado entre el Cochrane y el Huáscar.
En la convicción de que la Unión empeñaría combate con nuestro buque y en cumplimiento de la orden que por señales recibí del Cochrane, continué la caza, y a las doce, distando del enemigo diez mil metros y teniendo al vapor Loa por nuestro costado, le ordené aumentara su andar hasta llegar a dos mil metros del enemigo y le disparara con su cañón de caza, creyendo que con esta medida la Unión detuviera su andar y nos diera tiempo para atacarla.
Por la misma razón, el hombre público que sacrifica su opinión y sus sentimientos al terror, es tan cobarde como el militar que en el combate arroja las armas y huye.
Por ejemplo, cuando el cuerpo tiene sed, ¿no le impide el alma beber o comer cuando tiene hambre y otras mil cosas análogas donde vemos la manera manifiesta que el alma combate las pasiones del cuerpo?
Aquella noche nos ocupamos de dar sepultura a los que tan gloriosamente murieron en aquel día memorable, y en preparar nuestras armas para seguir el combate al día siguiente.
La persona incapacitada para velar por sí misma a causa de una deficiencia física o mental tiene derecho al respeto de su dignidad y a un régimen legal de protección, atención, readaptación y seguridad. Artículo 8º. El Estado combate y sanciona el tráfico ilícito de drogas. Asimismo, regula el uso de los tóxicos sociales.
En caso de conflicto armado que no sea de índole internacional y que surja en el territorio de una de las Altas Partes Contratantes, cada una de las Partes en conflicto tendrá la obligación de aplicar, como mínimo, las siguientes disposiciones: 1) Las personas que no participen directamente en las hostilidades, incluidos los miembros de las fuerzas armadas que hayan depuesto las armas y las personas puestas fuera de combate por enfermedad, herida, detención o por cualquier otra causa, serán, en todas las circunstancias, tratadas con humanidad, sin distinción alguna de índole desfavorable, basada en la raza, el color, la religión o la creencia, el sexo, el nacimiento o la fortuna, o cualquier otro criterio análogo.
Gracias y felicitaciones a todas las mujeres que nunca bajaron los brazos y que no los van a bajar y van a seguir trabajando junto a nosotros y junto al resto de la sociedad en el combate contra la trata de personas.
arte Oficial del Glorioso Combate del Dos de Mayo de 1866 contra la Escuadra Española A las 6 de la mañana de ayer el vigía de la oficina anunció, sobre el torreón, que se notaba cierto movimiento en la escuadra española, surta en el cabezo de la isla de San Lorenzo.