Entonces su hermano, el inca Paullu, se comprometió a hacerla
cejar y la dijo: -Beatriz, tu negativa será fatal para nuestro pueblo.
Ricardo Palma
ETEOCLES Ya le hay si la fortuna le protege, En manos, no en palabras poderoso; El hijo de Creonte, megareo, De aquellos autóctonos descendiente, Que sembró Cadmo en el terrón beocio; Ni el fiero resoplar de los caballos Le hará cejar un punto en la defensa; De su tierra nutriz tornará al seno, O con los dos varones y el escudo, Y la ciudad pintada por despojos, A Tebas volverá de gloria lleno.
Con esto Tarcón, cruzando a caballo en medio de la matanza por entre sus huestes, que ya empezaban a cejar, las alienta con sus palabras, llamando a cada cual por su nombre, y rehace las desbandadas filas.
El objeto primordial de la serie de cartas que éste viene publicando en aquel diario se explica bien en las siguientes palabras que constan al principio de la primera: «Uno de mis mayores gustos es no cejar un punto en la guerra a muerte que tengo declarada a Dios ».
Los dos combatientes se revuelcan por tierra, prontos a no cejar, dispuestos a vencer, procurando lograrlo con todas las armas de que la naturaleza les dotó.
Durante muchos días se le vio vacilante, rendido, sudando, pero sin cejar un punto en su tarea hasta que el montón subió algunas varas.
¡Lo que es él y lo que sufre! HERACLES Yo, que tantos, y tan arriscados, y tan verdaderos trabajos he aguantado, sin cejar, con mis puños y con mis hombros.
El Alférez Real detenía con mucho garbo su caballo delante del monumento, y saludaba al Santísimo batiendo por tres veces la bandera; concluido lo cual se retiraba hasta el atrio, haciendo
cejar al bucéfalo para no ofrecer la espalda al altar.
Ricardo Palma
Procura que no llore más y estime que pronto cese el mal que ahora la oprime; y le promete acompañarla a Holanda y no cejar hasta volverle todo y que haya hecho justa y memoranda venganza del iniquo sobremodo, con cuanta gente le procura Irlanda, y así lo hará del más rápido modo.
Esta matrona perdió a su esposo y no se contentó entonces con ir detrás del cuerpo con los cabellos en desorden, como es costumbre entre el vulgo, ni con golpearse el pecho desnudo ante los ojos de todos, sino que fue detrás de su finado marido hasta su tumba y luego de depositarlo, según la usanza de los griegos, en el hipogeo, se consagró a velar el cuerpo y a llorarlo día y noche. Sus padres y familiares no pudieron hacerla cejar en esa actitud que, llevada a la desesperación, la haría morir de hambre.
Siendo tal la tendencia de las cosas en este sistema, ¿quiere esto decir que la clase obrera deba renunciar a defenderse contra las usurpaciones del capital y cejar en sus esfuerzos para aprovechar todas las posibilidades que se le ofrezcan para mejorar temporalmente su situación?
Dedico estas páginas compiladas en las horas de mi larga y feliz convalecencia" -se ve que había estado enfermo- "exenta de formas académicas, pero sincera y patrióticamente sentida, y pídeme el deseo que cada argentino haga lo que deba y pueda, para lograr la conquista de nuestra independencia integral, y muéveme también el anhelo de que nuestra juventud se lance a la acción con todo el empuje de su voluntad tenaz y con el propósito firme e imperturbable de no cejar ante cualquier obstáculo o momento de adversidad".