Ponderaban el grosor de los pilares de San Pedro, Tívoli, el Vesubio, Castellamare y los Cassines, las rosas de Génova, el Coliseo a la luz de la luna.
José Mª de Areilza, alcalde de Bilbao. "Homenaje al Glorioso Ejército y Milicias Nacionales". Teatro Coliseo Albia (Bilbao). 8 de julio de 1937.
b) Estudios y Proyectos del Centro Múltiple, (antes Recinto Ferial). c) Planificación de los Graderíos y Cubierta de Coliseo Cerrado de Deportes.
Es la actual Ciudad de Piñas con sus airosos edificios modernos; con calles longitudinales y transversales muy bien arregladas y pavimentadas; avenidas amplias y escalinatas de cemento; servicios higiénicos, piscinas y baños públicos; Parque Central "Independencia, Mercado Central Moderno; Coliseo Municipal de Basquet Ball...
de terreno en la zona urbana para destinarlo al Complejo Ferial Turístico compuesto de Coliseo Cubierto, museo, stands para exhibición de ganado, áreas de recreo y parqueamiento, piscina, espacio abierto para lidia de toros, circo, etc.
Dímosla al otro teatro, mas allí contestaron que ellos no eran menos que los del otro
coliseo, y que no tomaban sobras: a fuerza, sin embargo, de emplear más empeños que para lograr una prebenda, se consiguió una orden a rajatabla de los señores que estaban a la cabeza del teatro; pero ya era tema: una actriz, sobre si le habían dado el papel de segunda siendo ella la primera, se puso mala la víspera; otro actor, también por etiquetas y rencillas, armó una intriga de todos los diablos: se pagó gente para el efecto, y si una noche se representó, una noche se silbó...
Mariano José de Larra
Era la tarde de San Pedro Apóstol, y gran concurso de jugadores ocupaba el
coliseo de gallos, situado entonces en la plazuela de Santa Catalina y en la vecindad del cuartel de artillería, cuya construcción se principiaba.
Ricardo Palma
El dueño del malatobo no consintió nunca que otro individuo sino él en persona amarrase la navaja a su gallo, cosa propia de un verdadero aficionado y tolerada por el reglamento del
coliseo.
Ricardo Palma
Un hospital para marineros en Bellavista; el templo de las Nazarenas, en cuya obra trabajaba a veces como carpintero; la Alameda y plaza de Ancho para las corridas de toros, y el
Coliseo, que ya no existe, para las lidias de gallos, fueron de su época.
Ricardo Palma
Otra real cédula prevenía que cuando el virrey asistiese al
coliseo, los comediantes o su empresario tenían la obligación de entregar al mayordomo o repostero de palacio algunos patacones para sorbetes y tente en pie de su excelencia y comitiva.
Ricardo Palma
Aquella noche recibió la Perricholi la ovación más espléndida de que hasta entonces dieran noticia los fastos de nuestro vetusto gallinero o
coliseo.
Ricardo Palma
Lloren las ninfas todas del
coliseo, que Apolo se retira de los festejos; aquel grande caudillo del galanteo, que al dios de los amores ofrece inciensos.
Ricardo Palma